Poza Rica, una mirada atrás

Alfredo “El Venado” Castellanos Tienda

Un Goleador Nato Surgido del Llano

El llano pozarricense ha realizado el sueño de muchos jugadores que aman jugar al futbol y que empezaron en la canchita de su escuela a patear el balón, otros en el terreno balido del barrio al que se le instalan dos portería endebles, sin las medidas reales, pero buscando homologar, en lo más que se pueda, a las que se usan en los partidos profesionales, en donde se imaginan ser el astro del equipo favorito o el máximo ídolo mundial, sentir que sudan con alto honor la camiseta y demostrar sobre el pasto las habilidades que no se le conocían, fue como Alfredo vivió las carencias  y lo difícil que es el llano futbolero, lugar que genera mucho futbol y de donde han salidos grandes jugadores en Poza Rica; ahí torneó sus músculos, demostró sus habilidades y terminó por destacar a temprana edad.

La mente de los vecinos de la colonia Laredo de Poza Rica, tiene el recuerdo de Alfredo Castellanos Tienda, destacado futbolista que ayudó a que el equipo Arsenal de su colonia fuera campeón en la Liga demostrando ser los mejores que lograron hacer realidad la ilusión de los vecinos, lo que es hoy para muchos, un recuerdo con mucha historia, futbolista que ha sido una enorme figura del futbol llanero de Poza Rica.

Alfredo Castellanos Tienda nació en la colonia Laredo de Poza Rica, Veracruz, el 16 de abril 1954, fue el segundo hijo del matrimonio que integraban la señora María de Jesús Tienda Oviedo y Don Arturo Castellanos Escudero, le antecedió Jorge y después de él nació Eduardo, Marco Polo, Joel, Juan, y Lilian, quienes vivieron su infancia y Juventud en la calle Doctores, frente a la capilla Maria Auxiliadora, en la cual oficiaba como párroco en ese entonces José de la Luz Silva Rodríguez, con quien Alfredo y otro grupo de niños entrenaba basquetbol.  

Alfredo Castellanos fue uno de esos niños que le gustaba tener un balón cerca de él, pisarlo con su pie derecho y moverse haciendo fintas, ir al llano con los amigos a echar una cascarita, así empezó a denotar sus habilidades, las que practicó cuando entró a estudiar en la escuela primaria Concepción Fuente, donde empezó a jugar de manera formal en los torneos del plantel con el equipo de su salón; y a esa edad con picardía fue bautizado por sus amigos con el mote de “Venado”, por lo veloz que corría y su capacidad para escabullirse de sus oponentes de mayor edad. Enfundado en la casaca de su equipo se sentía como pez en el agua aunque no sentía lo mismo cuando tenía que vestir el uniforme escolar, atuendo que no le gustaba, allá por el año 1961. 

Durante ese año, el joven Joaquín Lara Pérez, siendo promotor deportivo en ese barrio lo invitó a integrar en el equipo “Santos de la Laredo” en la categoría infantil, equipo que le permitió demostrar su forma fina de jugar, teniendo como entrenador a Heraclio Martínez Pacheco, uno de los jugadores más talentosos del futbol mexicano y que militaba con el equipo profesional “Petroleros de Poza Rica, que era patrocinado por el Ing. Luis Manuel Contreras Rodríguez, quien era Superintendente del Distrito de Poza Rica de Petróleos Mexicanos y presidente del Club Petrolero, fue ahí cuando por primera ocasión le dieron a Alfredo zapatos -tacos- para jugar futbol, día en que alcanzó un sueño, al portar un uniforme para jugar, de color blanco, similar al del emblemático equipo brasileño Santos.  

El equipo Santos local integró la Liga Petrolera del Interior del Campo Pemex, dirigida por Julián Buenrostro Torres, que se jugaba en el campo José Colomo, en donde participaban los equipos: Pelicanos, Potros de la Herradura que dirigía Andrés Merigo Solís, Halcones, Canarios dirigidos por el Ing. Pedro Manjarrez, El Tamsa, que manejaba José “Pepe” Lemus, entre otros equipos. Liga en la que Alfredo el “Venado” Castellanos jugó con sus cualidades innatas para el deporte del futbol, que incrementó su pasión al máximo, poniendo mucho de su parte, con gran disciplina, apegándose a las enseñanzas de Heraclio Martínez, en lo Técnico, y con ello explotar su habilidad, con un entrenamiento constante que lo llevaría a ser un deportista digno de portar un uniforme.  

A esa edad, El “Venado” Castellanos Tienda ya era motivo de observancia por otros entrenadores que deseaban tenerlo en su equipo, uno de ellos fue Andrés Mérigo quien lo invitó a jugar con “Los Potros de la Colonia Herradura”, lo que la agradó y pasó a este grupo, donde participó durante varias temporadas y al que Julián Buenrostro no le perdía la vista por su juego vertiginoso y frontal al gol. 

Tiempo después, invitado por Cesar “El Japo” Perales Guerrero, “El Venado” pasó al equipo “Ciudad Madero” de la colonia Benito Juárez, el que jugaba en la Liga de Cayetano Ledezma García, en la Categoría Infantil B, y que tenía como sede el campo Miguel Alemán, del Kilómetro 52, una categoría muy competida con equipos de esa zona. El equipo fue apoyado por el Sr. Marcelino Sánchez, un promotor deportivo muy estimado, dotándolos de uniforme como premio por haber sido los campeones torneo del ciclo anterior, al que llegó “El Venado”, cuando estudiaba la secundaria.    

El Ciudad Madero fue un equipo muy fuerte, lo integraban jugadores que con el tiempo llegaron a las selecciones infantiles y juveniles representando a Poza Rica en certámenes de futbol estatales, otros llegaron a la máxima categoría amateur de esta ciudad, entre los más destacados se recuerda a: Juan Guzmán Pérez, Jorge “El Bombero” Ovando Cruz, Ildelfonso “Carita” Ruiz Alvarado, Arturo “Cholenca” Mancha Rojas, Cesar “Japo” Perales Guerrero, Juan Ramón Rodríguez Badillo y Osvaldo del Ángel, que con la llegada de Alfredo Castellanos Tienda “El Venado”, repitieron por segunda ocasión el título de campeones. El equipo se erigió Campeón de Liga por tercera ocasión, por lo que Don Marcelino Sánchez los premia llevándolos a jugar un partido amistoso a Tampico, Tamaulipas, su tierra, contra un equipo de la colonia Mainero partido que se jugó en un campo de La laguna del Carpintero, y el que perdieron, pues enfrente tuvieron un equipo juvenil muy poderoso. Dejando constancia de ser un verdadero y digno representante de Poza Rica. ¡Un Trabuco de futbol Infantil!.    

Por otro lado, José Luis Vela Martínez, conocido como Pepe Vela, un promotor de futbol infantil y entrenador del equipo “Saprissa”, y cuyo campo para prácticas era en la escuela Niños Héroes de Chapultepec, invitó al Venado a integrar su equipo, y siguió reclutando jugadores de gran talla infantil para participar en la Liga de Futbol de Coatzintla, que se jugaba en el campo “Escuadrón 201”, en el que Alfredo mostró su gran calidad goleadora y su alto nivel futbolístico.

Posteriormente, “Pepe vela” se echó a cuestas la tarea de reforzar su equipo y empezó a invitar a jugadores de los equipos Ciudad Madero y de la Liga Petrolera, para conformar un equipo Saprissa con: Alfredo “Venado” Castellanos, Héctor “Tato” Maldonado Luna, Guillermo “Memo” López Ortiz, Jorge “Bombero” Ovando” Cruz, Ildefonso “El Carita” Ruiz Alvarado, Alejandro “Perro” González, Feliciano “Chano” Cobos Valdés, Rodrigo Manzanares, Antonio Montelongo, Javier “Pitis” Loya Vidal, Misael “Miza” González y Alfonso “Guanpas” Zenil, entre otros.

Este fue el magno trayecto de Alfredo El Venado Castellanos por la categoría juvenil, como un Centro Delantero altamente letal, con su pie derecho educado y prolífero en la repartición de juego, con un toque de balón conjugado con su habilidad que inquietaba a sus rivales, virtud que disfrutaban sus compañeros, genialidades que lo mantenían generalmente entre los punteros en la tabla de goleo, como integrante de selecciones de Poza Rica en varias categorías, pero sobre todo en la infantil, luciendo honroso haber sido campeón con este equipo

Cuando esta generación de niños rebasó la edad para jugar la categoría Infantil, Julián Buenrostro, presidente de la Liga petrolera ya tenía en mente un excelente proyecto, reclutar a un grupo  de ellos y formar un equipo que los ayudara en un proceso de alto rendimiento, así, inició invitando al joven entrenador Baltazar Lubio García, y le confirió la dirección técnica del equipo, al que llamó Santa Cecilia, en el año de 1966; con una estela de jóvenes brillantes: José Lemus Allende, Javier “Pitis” Loya Vidal, Joaquín Solís Alvarado, Ildelfonso “Carita” Ruiz Alvarado, Erasmo Chávela Calderón, José “Pino” Sánchez Medrano, Roberto Balderas, Juan de Dios Nava Tristán, Sixto Alejandre Castellanos y otros de suprema calidad. Debutaron en un Torneo Relámpago en Coatzintla, en el que tuvieron una notable y admirable participación.    

Cuando “El Venado” tenía 14 años de edad debutó en el equipo de “Tránsito del Estado”, de Plan de Ayala, Tihuatlán, en el que participaba en la categoría de Segunda Fuerza Amateur en la Liga de Poza Rica, con un paso efímero ya que una tarde de 1969, a pocas semanas de cumplir los 16 años, “El Venado” Castellanos fue a una práctica del equipo Santa Cecilia al campo José Colomo y le pidió a Baltazar Lubio, la posibilidad de para practicar con el equipo al cual se incorporó con el beneplácito de Baltazar Lubio al entregar “El Venado” su acta de nacimiento y las fotografías para su registro en la Categoría de Primera Fuerza Especial, máximo nivel amateur de Poza Rica, y así fue parte del elenco de jugadores juveniles de enorme porvenir en el futbol y uno de los mejores en kilómetros a la redonda, jóvenes rebosantes de talento y calidad, que provocaron una singular admiración por el gremio futbolero. ¡Sencillamente Cautivantes!.

En este equipo Alfredo Castellanos estuvo dos excelente temporadas jugando en la posición como medio campista creador, cualidades innatas que Baltazar Lubio descubrió en él, convirtiéndose en una pieza fundamental en el funcionamiento del Santa Cecilia, debutó súbito antes de cumplir los 16 años, en el majestuoso estadio 18 de Marzo, portando el número 10, en contra del equipo Gas L. P.; llegando al más alto nivel de calidad del futbol pozarricense en aquel inolvidable día, entró de cambio, en un juego cerrado, ambos equipos eran de los punteros en aquella temporada, partido en el que “El Venado” Castellanos anotó el único gol del cotejo, dando de esta manera el triunfo a su equipo. ¡Hazaña de ensueño!

Durante las dos temporadas que jugó con el Santa Cecilia, “El Venado” Castellanos derrochó clase pura al mismo tono que sus compañeros, equipo que se recuerda como un icono de aquella época. Más tarde dejó el Santa Cecilia y pasó, por invitación de Misael Garcia Casados, conocido como “Michel”, al de Combustión Interna, donde jugó de Centro Delantero con el número 9, convirtiéndose en dos temporadas en un implacable y temido rompe redes, constancia que dejó siendo segundo lugar de goleo, que le arrebataron primero Raúl Mely Hernández y más tarde Vicente Capellini, pero “El Venado” en ambas temporadas alcanzó poco más de 40 goles.

Posteriormente, decidió jugar con el equipo Arsenal de su querida colonia Laredo, en la Categoría Primera A, y en la siguiente temporada pasó a la Primera Especial con el equipo Arsenal de esta categoría, empero, durante esa época, tuvo la invitación de jugar en la Tercera División Profesional con el Poza Rica AC, la que declinó toda vez que ya se encontraba en la UNAM, estudiando la carrera de medicina, actividad que solo le permitía venir a Poza Rica cada fin de semana a jugar, quedando campeón en la temporada de 1977-1978 con el Arsenal, equipo que tienen un lugar especial en la historia del futbol llanero de esta ciudad.

Al terminar la tercera temporada con el Arsenal, en 1978, a la edad de 24 años Alfredo se fue a la ciudad de Villahermosa, Tabasco, invitado nuevamente por Michel García, a jugar en aquella ciudad en done representó a varias selecciones petroleras, logrando hacerse de planta en Petróleos Mexicanos, en ese mismo año contrajo matrimonio con la Señorita Elda Desales Carrasco, nativa de La Venta, Municipio de Juchitán, Oaxaca, y procreando 3 hijos: Alfredo Omar, Silviano Jair y Carlos Adrián, quienes venturosamente se titularon como profesionistas.

Elda y Alfredo viven felizmente en el maravilloso edén de Tabasco, este con el orgullo muy elevado al ser considerado todo un referente de su época en el futbol, un guerrero de muchas batallas futboleras, dueño de una singular forma deportiva, ser una persona ecuánime en el campo y fuera de él, mesura que conserva hasta la fecha lleno de amigos, jugador inolvidable en la historia del futbol de Poza Rica. ¡Muchas felicidades Campeón!


Twitter – @laopinionpr
Facebook – @LaOpiniónPozaRica
Youtube – La Opinión Poza Rica
¿Reporte y denuncia?
Si cuentas con imágenes o video que exhiban maltrato, abuso de autoridad, corrupción o cualquier acción inhumana. ¡Por favor, háznoslo saber!
– WhatsApp: (782) 219-94-02 <<< ¡clíck aquí!
– Por e-mail: denuncias@laopinion.net <<< ¡clíck aquí!

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es Digital.png
La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es Coronavirus-Ok2.png