Atlético en Poza Rica y Forjador de Campeones
POR: ING. JOSÉ LUIS RODRÍGUEZ BADILLO
El Maestro Marcos, como se le conoció y recuerda en el ámbito estudiantil y deportivo, siempre tuvo como convicción absoluta, guiar con firme propósito a sus alumnos de encontrar en el atletismo un camino a la mente sana y el entusiasmo por el estudio, generando con esta tesis centenares de atletas y profesionistas, así personas de éxito en la vida, de esta forma se resume y evoca a quien sin duda, ha sido único en este concepto, entrenador de las primeras glorias deportivas de Poza Rica a nivel estatal y Nacional.
Llegó de la escuela “Rafael Dondee”, instituto que forjó las primeras generaciones de maestros en la educación Física en el país, a implantar los conceptos puros del deporte del atletismo en Poza Rica. Marcos Ramírez nació en Pánuco, Veracruz, corazón de la Huasteca y cuna de la cultura del Huapango, el día 25 de abril de 1932, pero por razones que se desconocen, comenzó la primaria en algún lugar del estado de Puebla, y la continuó en otro de Oaxaca, la secundaria en la Rafael Dondee, antes o previa a su formación académica.
Su labor de profesor en la materia de educación física comenzó con el inesperado peregrinar de todo docente, fue enviado a Guadalajara, Jalisco, en donde empezó su larga y bella labor, con el silencio que siempre lo caracterizó, y así fue como llegó al Liceo Católico, una institución académica con valores y calidad, escuela en donde demostró la calidad de un buen instructor, siendo en esta ciudad que descubrió atletas de gran potencial de ambos géneros.
Tomó la tarea de pulir con singular atención a quien tenía un potencial, logrando que algunos llegaran a niveles de competencia olímpica con sus enseñanzas y consejos en la pista olímpica de Tokio 1964, entre ellas la velocista Esperanza Girón Olivares en los 100 y 200 metros planos, considerada también la competencia de relevos de la misma distancia representando a México, y siendo la primera atleta en participar en la especialidad de 200 metros planos en esta justa.
Después de un año dejó Guadalajara para irse a Hermosillo, Sonora, que fue un lugar de tiempo efímero, el que consideró fue sin pena ni gloria, y tomó el rumbo a Nuevo León, para instalarse en la ciudad de Monterrey, ahí solo descubrió e inició la carrera atlética de Guadalupe Lartigue como lanzadora de bala y disco en tan solo cuatro meses, y fue cuando a sus oídos llegó el comentario que Poza Rica era una ciudad con gran crecimiento y no soslayo la posibilidad de venir a buscar una oportunidad de tener un trabajo digno para desarrollar su probada capacidad, calidad y talento de entrenador de pista y campo en el atletismo.
Corría el año de 1958 cuando llegó a Poza Rica, y le dieron informe del Profesor Fausto Moncayo Moncada de la escuela Venustiano Carranza, en donde trabajó de inició ambos turnos como maestro de Educación Física, anexando a su labor la escuela Miguel Alemán, contigua a esta, siendo como inició su larga carrera en Poza Rica, enlazando a niños y jóvenes a la práctica del atletismo en un lugar virgen en esta actividad, para lo que tuvo que trazar pistas en los patios de las escuelas, hacer trámites para adquirir; discos, jabalinas, pértigas, para practicar etas competencias.
Para el año de 1959 el Profesor Rafael Pérez López lo integró a sus proyectos de las escuelas donde tenía el cargo de director, es como se integra como docente en la legendaria y más grande escuela del estado de Veracruz, la Artículo 123 María Enriqueta que tiene dos mil alumnos en turno matutino y la misma cantidad en el vespertino, lo que fue un oasis para sus pretensiones de hacer de ellos excelentes atletas en el deporte y capitalizar sus cualidades y aptitudes, saliendo de ahí un proyecto de máximas expectativas para elevar el nivel de Poza Rica en justas regionales, estatales y nacionales, con la potencia oportunidad de nutrir la selección de México para competencias internacionales.
Con la responsabilidad rebosante de entusiasmo, el joven Profesor Marcos García realizó un proyecto que presentó al Profesor Rafael Pérez López y Maestra María Esperanza Morales, a quienes de inmediato convenció y levanto como resorte un magno entusiasmo, al ver resuelto una tesis que tenían pendiente. Viendo la gran respuesta, Marcos presentó una lista de requerimientos fundamentales para hacer realidad este plan de trabajo, que se institucionó académicamente.
Como respuesta de su solicitud de una pista y la imperante infraestructura para la práctica de las diferentes disciplinas del atletismo, en pocos meses se empezó a trazar topográficamente en la parte externa del campo de futbol, líneas encaladas para construir las guarniciones de concreto que confinaron la pista para carreras de atletismo, con el suelo nivelado, compactado con una capa de arena dosificada con arcilla y limo, fue una magnifica superficie de pista elíptica con curvas en un extremo, e incompletas del otro.
Junto a la pista se construyó una fosa para la competencia de salto triple, en donde se forjarían estrella infantiles y juveniles en esta especialidad, que prácticamente era desconocida, todo se concentraba en la figura del profesor Marcos Ramírez, quien de forma muy sencilla y amable daba las indicaciones correspondientes para dejar las condiciones necesarias para el desempeño de su cátedra.
A partir de que fue terminada la pista y fosa, enseñó las técnicas para impulsar en los niños el lanzamiento de disco, bala y jabalina, lo que fue para los niños y jóvenes fue toda una novedad, el “Maestro Marcos” como se le empezó a llamar, únicamente con los manuales que trajo y los aprendido en la escuela, empezó a dar impulso a estas disciplinas totalmente novedosas para los jóvenes y menores de la escuela, lo que causó un gran revuelo e inquietud, y que pocos meses empezó a verse por la recién llegada señal de televisión en Poza Rica, que generó se vieran por primera vez unos juegos olímpicos, en esta ocasión los de Tokio 1964.
En poco tiempo Marcos Ramírez empezó a interaccionar con el Prof. Juan López Gazca, quien ejercía como funcionario del deporte en el municipio, formando una dupla mágica para el deporte en Poza Rica, generando un grupo de alta calidad de atletas en diversa disciplina, destacando en antes de 1968 una generación valiosa integrada básicamente por los jóvenes: Moisés Vázquez Herbert, Víctor Vicente Herrera Telles, Héctor Manuel Ramírez Chávez, Víctor Manuel Mendiola García, Felipe Ojeda Solís y David Vázquez Valdez, quienes llegaron a Juegos Nacionales, logrando inmensa cantidad de medallas en lo más alto de podium.
Los Profesores Marcos Ramírez García y Juan López Gazca recibieron desde la Dirección de Deportes del estado de Veracruz, la instrucción para que integraran un grupo de atletas destacados de Poza Rica y la región, para ser parte del traslado del fuego Olímpico que entró por el puerto de Veracruz, proveniente de Grecia, en alusión a las olimpiadas de México 1968, ambos conocedores de quienes fueron sus pupilos en Poza Rica, que habían llegado a juegos, estatales, pre nacionales y nacionales con logros seleccionando a: Héctor Manuel Ramírez Chávez, Moisés Vázquez Herbert, Víctor Manuel Mendiola García, Felipe Ojeda Solís y David Vázquez Valdez quienes corrieron un kilómetro con la antorcha olímpica en relevo desde el puerto de Veracruz a Jalapa, y de ahí al pebetero del estadio México 68.
En el año de 2008 siendo presidente municipal de Poza Rica, el Prof. Guadalupe Velázquez Casanova, tomó la atinada decisión de inmortalizar a Marcos Ramírez García, poniendo en su honor a la pista de tartán para atletismo del estadio “18 de Marzo” su nombre, este emblemático lugar en donde el Profesor descubrió y levantó una inmensa cantidad de deportistas infantiles y juveniles dedicados al atletismo, varios de ellos llegaron a lo más alto a nivel nacional en su respectiva especialidad, otros a juegos centroamericanos, algunos a los panamericanos y una media docena a juegos Olímpicos, entre los destacados desde competencias infantiles escolares que descubrió Marcos Ramírez en 1961, se evoca uno de ellos al joven José Manuel Cárdenas Vázquez, que al ser campeón Nacional de salto de longitud en el Distrito Federal con marca de 5.36 metros, se quedó en las puertas de los juegos Panamericanos, que se iba a celebrar en San Juan de Puerto Rica, suspendidos cuando Los Estados Unidos
Posteriormente a él, están: Rosa Emilda Vásquez, Moisés Vázquez Herbert en salto de longitud y carrera de 100 metros planos y relevos de cuatro por cien, llegó a los juegos nacionales representando a Veracruz, Héctor Abid Triana en tiro de jabalina y bala, Víctor Manuel Mendiola García, quien llegó a juegos estatales en 100 metros planos y relevo de cuatro por cien, la niña Herlinda Lagos que compitió en 75 metros planos, Víctor Vicente Herrera Telles campeón estatal de salto de altura, en la última etapa de su carrera magisterial en el deporte, el atleta Herman Adam Negrete, Patricia Acosta Otáñez, Daniel Ruiz Ramírez y la inmensa pozarricense Romary Rifka González, que el 25 de julio del 2007 se convirtió en la primera mexicana, en ganar la medalla de oro en la prueba de salto de altura con 1.95 metros, en los XV juegos Panamericanos celebrados en Río de Janeiro, Brasil.
Los días, semanas y meses en la pista del estadio 18 de Marzo generaron como en pocos lugares, descubrir, pulir la calidad y capacidad de muchos jóvenes, en donde predominó la ejemplar paciencia, convicción y expectativas puesta en cada uno de ellos por el “Maestro Marcos” como se le conoció, no se puede omitir a: Guadalupe Gómez Villegas y María Isabel Burgueño Padilla quienes tuvieron deslumbrantes logros con resonados triunfos en el atletismo, un atleta que le dio muchas gloria, fue Cesar Valentín Jonguitud, quien participó en Corea del Sur y Seúl en los mundiales juveniles, de ahí paso por el país de Portugal, llevando el nombre de México el joven pozarricense.
Deportistas que hoy en día recuerda los momentos de júbilo de llagar a la pista de competencias, en donde algunos lograron su objetivo, otros una meta y muchas el placer de competir, encaminó a los jóvenes a hallar una oportunidad para destacar en el atletismo, y con ello, descubrir y pulir niñas y señoritas con magnas cualidades y talento para las diferentes disciplinas en la pista y el campo, logrando una imagen de respeto, idolatría y gloria deportiva.
Durante el año de 1976 ingresó por méritos propias a la Dirección de Educación Física del estado de Veracruz, un grupo selecto de especialistas que se integró al servicio de los deportistas, junto al Profesor Juan López Gazca y docentes de la educación física, agrupando a promotores deportivos, directivos, entrenadores y árbitros, todo un colegiado a favor del deporte y la juventud.
En el rubro internacional el Profesor Marcos Ramírez piso varios países, gracias a su singular calidad, destreza, en donde incorporó a sus conocimientos nuevas técnica, para después aplica esa enseñanza a niños y jóvenes, de esa manera logró conocimientos de vanguardia, un caballero que nunca perdió oportunidad de ver a sus colegas y deportistas con respeto en toda competencia, tuvo la sensatez de invertir en adquirir literatura deportiva como las revistas especializadas, así llegó a esta ciudad y así seguía llegando de las competencias o giras, ¡Todo un Docente!.
Las salidas al extranjero fueron muchas, y pese a su trato, nunca se vanaglorio de esto, piso varias ciudades de estados Unidos, como Delegado o Entrenador a competencias de nivel académico, integrando delegaciones deportivas, así también estuvo en La Habana, Cuba y San Juan de Puerto Rico en ambas ocasiones respirando el aire de estas bellas islas: los países de Centro América; Tegucigalpa, Honduras, la ciudad de Maracaibo, Venezuela y Managua Nicaragua.
El Caribe también fue parte de su agenda deportiva: Las Bahamas, Islas Vírgenes, las islas de Trinidad y Tobago, la ciudad de Kinston, Jamaica, la isla de Barbados, su pasaporte también había sido sellado en el cono Sur, al ser parte de la delegación mexicana, en la ciudad de Sao Pablo, Brasil, lo mismo sucedió en el norte de nuestro continente cuando fue parte de una delegación Azteca en Toronto, Canadá.
Antes de retirase de toda actividad deportiva, descubrió y desarrolló las habilidades de la señorita jóvenes Nuri Rubí Pérez García para competencias de 800 metros planos. De igual manera a su hermano y Marbin Kevin en el lanzamiento de bala y disco, llevándolos a competencias de alto nivel; y fue el día 20 de diciembre de 2011 que se dio a conocer la triste noticias, que el distinguido y apreciado profesor Marcos Ramírez García, había dejado este mundo, para partir al reino del Señor, la consternación fue muy inmensa en Poza Rica y la Región, la grey del deporte en muchas disciplinas, así como los académicos de varios niveles escolares no lo podían entender y manifestaron el gran vacío que generaba su partida en esta tesis, ¡a quien hizo del deporte y en particular el atletismo, una cultura con vinculo de cohesión humana!