Tlanchinol, Hgo.- Cinco muertos, además de varios heridos y cuantiosas pérdidas materiales, es el saldo trágico que dejó las festividades de Día de Muertos en la Sierra y Huasteca Hidalguense.
La primera tragedia se registró en el municipio de San Felipe Orizatlán, luego de que un joven de 23 años de edad fuera asesinado a balazos.
El 1 de noviembre, una camioneta se precipitó al barranco de aproximadamente 100 metros de profundidad, dejando tres muertos y cuatro heridos, así como cuantiosas pérdidas materiales.
Los ocupantes de dicha unidad venían de una fiesta y al dirigirse a la cabecera municipal, el conductor de dicha unidad motora, perdió el control del volante, provocando que cayeran al profundo barranco.
El 2 de noviembre, una tragedia se suscitó en la comunidad de Santiago Segundo perteneciente al municipio de Xochiatipan, luego de que uno de los vecinos, fuera localizado ahorcado y pese a que intervinieron autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) el cadáver no fue enviado al Servicio Médico Forense, esto a petición de los familiares.
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