TAQUICARDIA
POR FABIÁN MARTÍNEZ
Desde los gobiernos priistas hasta los panistas y ahora morenistas, una de sus banderas políticas en Poza Rica, fue la de municipalizar la delegación de Tránsito.
Por un lado para tener el control de la operatividad de la delegación y, por el otro, supuestamente acabar con la corrupción que durante muchos años han padecido los pozarricenses.
En la administración anterior se municipalizó la Policía, hasta el momento los resultados no han sido nada positivos y por el contrario, las quejas aumentaron en contra de sus elementos.
Así también ha sido cuestionado el alto costo que representa para el gobierno municipal la plantilla de policías activos y administrativos, así como los mandos de la corporación.
Ante los presuntos actos de corrupción y operativos que se realizan en el municipio,
se han confirmado grupos de resistencia social que han evidenciado públicamente algunos casos.
Por está razón, algunos funcionarios públicos como el actual director de Tránsito, Héctor Martínez Probo, han retomado el tema de la municipalización.
Aunque claro está, tendrían que adecuar el reglamento para dar certeza jurídica a la corporación y hacer un proyecto que en realidad combata la corrupción, se fomente una cultura de vialidad y se realicen los estudios necesarios para mejorar todas las vialidades en la ciudad.
Apenas van siete meses de administración, y tienen tres años para hacer realidad el proyecto que administración tras administración se cacarea, pero es fecha que no se puede aterrizar.