TUXPAN, VER.- En una conferencia virtual reciente, José Manuel Pozos Castro, quien hasta hace poco fungía como presidente de la Conferencia Estatal de Seguridad Pública Municipal, presentó su renuncia al cargo. Durante su intervención, Pozos Castro dejó en evidencia que su gestión al frente de dicho organismo nunca cumplió con las expectativas de mejorar la seguridad pública en Veracruz, ya que, según señalan varios actores políticos y sociales, su labor se limitó a ser un simple «parapeto» sin implementar estrategias efectivas para garantizar la paz y el orden en el estado.
La renuncia de Pozos Castro ocurre en un contexto complicado, donde los índices de violencia y delincuencia en diversos municipios de Veracruz siguen siendo altos, y en particular, en Tuxpan (el municipio que gobernaba hasta el momento), se reportan cifras alarmantes. En este municipio, uno de los más afectados por la violencia, los índices de criminalidad han colocado a Tuxpan en los primeros lugares de la lista de municipios con mayor inseguridad en todo el estado.
Durante su gestión al frente de la Conferencia Estatal de Seguridad Pública Municipal, Pozos Castro, además de no implementar políticas efectivas para la prevención del delito, no mostró avances significativos en la creación de estrategias conjuntas entre los municipios y el gobierno estatal para reducir los índices de violencia. En lugar de tomar medidas concretas, la sensación generalizada fue que la conferencia se convirtió en una instancia más de pura representación, sin tener un impacto real en la seguridad de los veracruzanos.
En la misma conferencia virtual, el Gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, dio por oficial la renuncia de Pozos Castro, quien ahora se incorpora a un nuevo cargo dentro del gobierno estatal, donde se sumará al equipo encabezado por Rocío Nahle. Esta transición en la gestión de la seguridad pública en el estado no pasó desapercibida, ya que la falta de resultados concretos en la seguridad ha sido uno de los puntos más criticados de la administración actual.
En su lugar, fue designado Javier Hernández Candanedo, alcalde de Misantla, quien asumirá la presidencia de la Conferencia Estatal de Seguridad Pública Municipal. Hernández Candanedo, quien se presenta como una nueva cara dentro de la seguridad en Veracruz, tendrá la tarea de generar un enfoque renovado para abordar los desafíos de seguridad que enfrenta la entidad, que sigue siendo una de las más violentas del país.
La renuncia de Pozos Castro y la designación de Hernández Candanedo no hacen sino resaltar la urgente necesidad de replantear las estrategias de seguridad en Veracruz, un estado que sigue enfrentando retos significativos en términos de violencia, crimen organizado y, en general, la protección de sus ciudadanos. En este sentido, la ciudadanía y los actores políticos esperan que la nueva administración de la Conferencia Estatal logre implementar un plan integral que verdaderamente atienda las causas de la violencia y no solo reaccione a los efectos de la misma.
La renuncia de Pozos Castro, lejos de ser vista como una solución, deja claro que la falta de eficacia en las estrategias de seguridad es un tema que aún debe ser abordado con mayor seriedad por parte de las autoridades del estado de Veracruz.