Parque Juárez producto de un despojo

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Luis Navarro Arteaga

Dos mil metros cuadrados del parque Juárez fueron el botín de un despojo que, en los años 50, las autoridades municipales de Poza Rica, encabezadas por Raúl Lara Mendoza, realizaron en contra de un terrateniente de la época y que dio pie a un larguísimo pleito legal que llegó a la Suprema Corte de Justicia y que si no fuera porque La Opinión le dio puntual seguimiento habría caído en el olvido.

El 20 de julio de 1966, el mejor diario de la zona norte de Veracruz publicó la nota titulada: “Posible entendimiento de Chena y el ayuntamiento” en la que se informa sobre el dialogo que sostenían el terrateniente Humberto Chena, víctima del despojo y Luis Vázquez O` Farril, entonces presidente municipal de Poza Rica.

La noticia recuerda que “ el problema surgió  cuando se hizo el convenio  para la construcción del parque Juárez ( en el que) se estipulaba  que el parque se construiría  sobre ocho mil metros cuadrados, pero cuando se comenzó la obra se tomaron dos mil metros más, propiedad del señor Chena, sin antes resolverse  el problema de la tenencia en propiedad  de esa otra superficie”

Más adelante se indica que La SCJN “ acaba de fallar dándole la razón  al señor Chena y obligando al ayuntamiento a devolverle esos dos mil metros cuadrados que se afectaron de su propiedad” pero esa fraccionan de terreno ya estaba integrada al parque. La nota agrega que “la reclamación que se hace sobre esa superficie es de 600 mil pesos”.

La Opinión dio puntual seguimiento al conflicto, primero se dio a conocer el inicio de las obras de construcción y después las del litigio. El 23 enero de 1955 se informó que el ingeniero Jaime J.  Merino, entonces superintendente de Pemex en la región  “visitó las obras del parque municipal”, el 26 enero 1955 se publicó la noticia denominada:  por terminarse vía circundante del nuevo parque, para el  el 28 Enero 1955  se hablaba de la construcción de un teatro al aire libre  y el 24 febrero de 1955
se informaba que “Combustión interna donó dos bancas para el parque”

Hasta aquí todo iba muy bien pero 3 de junio de 1955 se informó que había sido  “Suspendida la construcción del parque”  tras los reclamos de Chena quien se amparó en contra de las acciones de la autoridad municipal.

El 28 de junio de 1955 se dio a conocer que “Ganó el amparo Poza Rica pues el juzgado tercero de distrito de Tuxpan, cuyo titular era Jesús Báez le dio la razón al ayuntamiento, pero el afectado solicitó la revisión del dictamen, por lo que días después, el  16 de julio de 1955 La Opinión publicó  que
se dio entrada a la revisión de amparo de Chena en Monterrey”.

Mientras el proceso continuaba el 21 de julio de 1955 se dio a conocer que se habría de empezar la construcción del kiosco del parque municipal, en el centro de ese espacio público y se convocaba a los ciudadanos a seguir donando plantas.

El 31 de agosto de 1955 la situación favorable que había tenido el ayuntamiento de Poza Rica  hasta entonces comenzó a cambiar y en estas páginas se informó puntualmente,    la noticia principal fue
Las obras del parque paradas porque “ Los magistrados del Tribunal Colegiado del tercer circuito de la ciudad de Monterrey resolvieron con fecha del día 10 de los corrientes conceder la suspensión definitiva a favor de Chena y socios” por lo que el alcalde Raúl Lara Mendoza debió suspender , el 27 de ese mes las obras del parque

En  medio del pleito la gente seguía contribuyendo a la construcción del parque como se publicó el 1 enero de 1958 cuando circuló la nota titulada “Más cooperación” de petroleros para el parque Benito Juárez.

11 años y 5 alcaldes después del inicio de las obras del parque y de la disputa legal, La Opinión publicó que la Suprema Corte de Justicia le dio la razón a Chena y que para el 20 de julio de 1966 ambas partes negociaban una salida “ para resolver este problema en una forma que no afecte a los intereses de la comunidad y que no sea gravoso para el erario municipal.
Sobre cómo se resolvió el problema hablaremos en otra entrega, por lo pronto adelantamos que afecto de manera importante la vida de la ciudad.