Hipólito Moreno Tapia
Castillo de Teayo, Ver.- Puntualmente, conforme a la tradición, la noche del sábado 9 de noviembre se llevó a cabo la festividad Ochavario, para encaminar a los fieles difuntos en su regreso luego de la visita durante Todos Santos.
Para ello se desarrolló un evento ante el edificio prehispánico que distingue a Castillo de Teayo, pues es el único lugar que en el centro de la población conserva una estructura de este tipo, destacó el maestro Luis Cardona, conductor del programa.
Explicó que, en el ochavario, es decir, ocho días después del Día de Muertos, en localidades de la huasteca baja persiste la costumbre de hacer rezos a los difuntos e ir al cementerio nuevamente.
Asimismo, en los altares se colocan las últimas ofrendas con tamales, pan de muerto, chocolate, pan, atole, frutas, agua, refrescos, aguardiente, cerveza y otros productos, así como la tradicional flor de cempasúchitl.
Del mismo modo, en las aceras de esta villa se encienden cientos de velas “para guiar a las ánimas en el camino de regreso al Mictlán o inframundo”, aunque en la huasteca también se tiene la creencia de que las almas de los fieles difuntos permanecen todo el mes de noviembre en el plano terrenal, por lo que hasta el día 30 se hace la última despedida con la ofrenda final.
En este contexto, al caer la tarde del sábado se efectuó el Festival Ochavario 2024 frente a la pirámide, que por tercer año consecutivo incluyó la presentación de danzas con sones huastecos por parte de distintas cuadrillas de catrines, catrinas y otros personajes alusivos al Xantolo.
Un momento esperado fue el encendido de 3380 veladoras en la escalinata de 26 peldaños de la pirámide de 16 metros de altura, con las cuales se formó una cruz coronada con un arco y en el centro los números 24/25, en alusión al año que está por concluir y al que iniciará.
La organización y logística del evento y para distribuir mil 400 tamales, chocolate y pan entre los danzantes y asistentes, estuvo a cargo del comité que encabeza Yannic Salas Martínez como presidenta, Víctor Manuel Zúñiga Vargas como secretario de organización, Alfredo Rodríguez Cruz como secretario, y Luis Antonio Guerrero Zúñiga como tesorero, así también el apoyo de 7 vocales.