Fuentes cercanas al gobierno de Cuitláhuac García han comenzado a filtrar documentos e información sensible que exponen la podredumbre interna de la administración que está por concluir. Según estas revelaciones, las secretarías de Salud y Educación destacan como las áreas con mayores señalamientos por parte de informantes de confianza, quienes aseguran que las promesas de honestidad de esta administración han caído en saco roto.
Se recuerda que, como gobernador, Cuitláhuac García es directamente responsable de los desvíos, robos y malas prácticas cometidas bajo su mandato, por lo que su afirmación de desconocer las acciones de sus colaboradores es calificada como una mentira.
Entre las denuncias recibidas por esta redacción, se menciona a Avisack Douglas Coronado, actual «Enlace de Comunicación Social» de la Secretaría de Salud, quien según fuentes dentro de la institución, ha sido una pieza clave en la administración de la opacidad y el favorecimiento de ciertos intereses. Se señala que Coronado, en su intento por asegurar su permanencia en el cargo con la próxima administración, ha mostrado un comportamiento sumiso hacia quienes han detentado el poder dentro de la Secretaría, además de involucrarse en maniobras internas que llevaron a la salida del Dr. Roberto Ramos Alor, ex titular de la dependencia, debido a diferencias con el actual equipo de trabajo.
Coronado, quien se habría mantenido en su puesto gracias a la protección de altos funcionarios estatales, también es acusada de nepotismo. Se señala que mantiene en nómina a su novio, quien, según las fuentes, es el «fotógrafo oficial» de la Secretaría, lo que refleja un claro abuso de poder y favoritismo.
Las denuncias van más allá, apuntando a una red de asignación de plazas y contratos sin transparencia, donde figuras como Facundo Valdivia, Verónica Durante Marini y Romana Gutiérrez Polo se habrían beneficiado de puestos clave, mientras que personal con años de servicio en la Secretaría, como los denunciantes, se ha quedado sin acceso a estabilidad laboral.
Además, la red de corrupción se amplía a la asignación de bases laborales, donde se acusa al director administrativo Jorge Eduardo Sisniega Fernández de favorecer a su círculo cercano, dejando fuera a aquellos que realmente han trabajado en la institución.
Con el fin de evitar que este tipo de prácticas continúen, los denunciantes hacen un llamado al nuevo titular de la Secretaría de Salud para que ponga un alto a los abusos y garantice una transición limpia en la administración estatal. La preocupación es clara: que la impunidad no siga siendo la norma al interior del gobierno de Veracruz.
Con información de Claudia Guerrero Martínez