El Gobierno del Estado de Javier Duarte de Ochoa abandonó a Tamiahua en materia de seguridad, tras el incidente en que familias de la villa quemaron el palacio municipal para exigir la destitución de la Policía Municipal, a quienes implicaron en actos de corrupción y levantones.
A más de un año y medio de ese suceso, Tamiahua cuenta con solo cinco elementos en la corporación de seguridad municipal que están desarmados y no cuentan con lo necesario para hacer frente a la delincuencia y hacer cumplir el bando de Policía y Buen Gobierno.
















