Poza Rica, Ver.- Camiones que transportan hidrocarburos son los responsables de la destrucción de amplios tramos de la carretera a Santa Águeda, así lo reportan vecinos de las comunidades La Grandeza y Donato Márquez, en el municipio de Papantla.
Las condiciones en las que encuentra la carretera son propicias para que se arruinen los vehículos, lo que provoca daño a la economía de los habitantes del lugar. El mal estado del camino también puede generar accidentes, es decir, está en riesgo la integridad de cientos de personas que circulan por esa ruta.
Los quejosos mencionan que en algunos tramos los conductores de vehículos particulares o de transporte público deben invadir carril para evitar los enormes baches. Estas acciones ponen en riesgo la vida de los viajeros debido a que podrían registrarse choques de frente entre unidades que viajan a toda velocidad y en sentidos opuestos.
Los vecinos de las comunidades responsabilizan tanto a Petróleos Mexicanos como a las compañías que trabajan para la empresa, ya que día y noche circulan por ese camino autotanques y otras unidades pesadas que provocan el asentamiento y la fractura del concreto hidráulico y del asfalto.
Las pesadas unidades que circulan hasta de madrugada son también, según los vecinos, las que se encargan de hacer más grandes los baches ya que no los evitan y con ello van haciendo más anchos y más profundos los huecos.
Cabe mencionar que hace solo algunos años, un tramo de esa carretera fue pavimentado y tuvo un costo elevado, sin embargo, la circulación de unidades pesadas cargadas con hidrocarburos ha echado a la basura la inversión de recursos públicos que se hizo para mejorar el camino.
Los campesinos exigen la intervención de las autoridades para regular el paso de pesadas unidades por el camino y para rehabilitar los tramos que se encuentran en pésimas condiciones.
En los lugares en los que no hay concreto hidráulico sino asfalto la situación no es mejor, pues se pueden ver enormes baches a lo largo de varios kilómetros. Los habitantes de esas comunidades se sorprenden de la enorme cantidad de vehículos cargados con hidrocarburos que pasan circulan durante el día, pues una de dos, aún es inmensa la riqueza que se extrae del subsuelo de la región o puede haber alguna actividad irregular detrás de esa enorme cantidad de viajes.
FOTO: RAFAEL RODRÍGUEZ ÁVILA