Debido a un infarto, campesino de Álamo murió en un hospital.
Cerro Azul, Ver.- A pesar de los esfuerzos médicos que realizaron en el hospital de la comunidad de esta ciudad, un campesino originario de una comunidad del municipio de Álamo perdido la vida durante la tarde de este martes presuntamente debido a un infarto.
Sobre está situación se dio a conocer que durante el transcurso de esta tarde arribo una ambulancia procedente del municipio de Tepetzintla en donde transportaban un masculino que se había sentimos mal de salud.
Refiere personal de emergencia que presuntamente el occiso fue identificado como Juan “N”, con domicilio en la comunidad de Zapotitlán perteneciente al municipio de Álamo, dicha persona llegó a un consultorio del municipio de Tepetzintla acompañado de su esposa para recibir atención médica debido a que se sentía mal de salud.
Al recibir la atención médica canalizado a bordo de una ambulancia al hospital de la comunidad, en el trayecto este sufrió un infarto, al arribar al nosocomio presión médico le brindaron los protocolos correspondientes para restablecer su salud sin embargo este desafortunadamente perdió la vida.
- EVITA UN INFARTO
Prevenir un infarto implica adoptar un estilo de vida saludable y controlar los factores de riesgo que pueden contribuir a las enfermedades cardiovasculares. Aquí te dejo algunas estrategias clave para reducir el riesgo de un infarto:
1. Alimentación saludable
Dieta equilibrada: Incluye frutas, verduras, granos integrales, proteínas magras y grasas saludables como las que se encuentran en el aguacate, las nueces y el pescado.
Reducir grasas saturadas y trans: Evita los alimentos procesados, fritos y con alto contenido de grasa, ya que pueden elevar el colesterol.
Disminuir la sal: Limitar el consumo de sodio puede ayudar a controlar la presión arterial.
Evitar azúcares añadidos: El exceso de azúcar puede contribuir a la obesidad y aumentar el riesgo de diabetes, lo que está relacionado con problemas cardíacos.
2. Ejercicio regular
Actividad física moderada: Se recomienda al menos 150 minutos de actividad física moderada a la semana, como caminar, nadar o montar en bicicleta.
Entrenamiento cardiovascular: Ejercicios como correr, nadar o andar en bicicleta fortalecen el corazón y mejoran la circulación.
Fortalecimiento muscular: Incluir ejercicios de fuerza al menos dos veces por semana para mantener el cuerpo en forma y el metabolismo activo.
3. Control del peso
Mantener un peso saludable reduce la presión sobre el corazón y disminuye el riesgo de diabetes y presión arterial alta, ambos factores importantes en la prevención de infartos.
4. Dejar de fumar
Evitar el tabaco: Fumar daña los vasos sanguíneos y aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas. Dejar de fumar reduce considerablemente el riesgo de un infarto.
5. Limitar el consumo de alcohol
Beber en exceso puede elevar la presión arterial y contribuir a problemas cardíacos. Si bebes, hazlo con moderación: hasta una bebida al día para mujeres y dos para hombres.
6. Controlar la presión arterial
Monitoreo regular: Si tienes hipertensión, sigue el tratamiento indicado por tu médico y revisa tu presión arterial con frecuencia.
Reducir el estrés: El estrés crónico puede contribuir a la hipertensión, así que actividades como la meditación, el yoga o técnicas de respiración profunda pueden ser útiles.
7. Control del colesterol
Mantén un nivel adecuado de colesterol en sangre. Si los niveles de colesterol LDL (el “malo”) son altos, aumenta el riesgo de acumulación de placa en las arterias, lo que puede conducir a un infarto.
8. Control de la diabetes
Si tienes diabetes, es crucial mantener los niveles de glucosa bajo control. La diabetes no controlada puede dañar las arterias y aumentar significativamente el riesgo de un ataque al corazón.
9. Dormir bien
Dormir entre 7 y 9 horas por noche es importante para la salud del corazón. El sueño inadecuado se ha relacionado con el aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares.
10. Control de estrés
El estrés excesivo puede aumentar la presión arterial y contribuir al riesgo de infartos. Encontrar formas saludables de manejar el estrés, como el ejercicio, la meditación o hablar con un terapeuta, es crucial.
11. Revisiones médicas regulares
Las visitas regulares al médico pueden ayudar a detectar y tratar factores de riesgo temprano, como hipertensión, colesterol alto o diabetes.
Adoptar estas medidas no solo reduce el riesgo de infarto, sino que también mejora la salud general del corazón.
Consulta regularmente con un médico. Realiza chequeos médicos periódicos, sobre todo si tienes antecedentes familiares de enfermedades cardíacas, hipertensión o diabetes.
Implementar estos cambios puede reducir significativamente el riesgo de sufrir un infarto, mejorar la salud en general y aumentar la calidad de vida.