ALAMO, VER. – El constante incremento en los precios de los combustibles, mantiene en jaque a los automovilistas tanto particulares como a los prestadores de servicios como los taxistas y transportistas de diversos productos, incluidos los de mudanzas.
“Es una situación que la verdad, no vemos para cuándo el gobierno federal haga algo para frenar los aumentos, aunque se decía que estos no iban a variar y se iban a mantener, lo cierto es que los incrementos son silenciosos, graduales y constantes aunque de a poquito en poquito”, comentaron trabajadores del volante.
En ese sentido, se pudo constatar que en algunas gasolineras de la citrópolis, el precio de la Magna se vende en 21 pesos con 86 centavos el litro, la Premium cuesta 22 pesos con 96 centavos mientras que el Diesel por litro se está vendiendo en 23 pesos con 10 centavos.
Con mínimas diferencias, en otras estaciones de servicio los precios son “menores”, pero varían en razón en la zona donde se ubiquen por ejemplo, Poza Rica, Tuxpan, Papantla y otras regiones.
No obstante, la Procuraduría Federal del Consumidor PROFECO, en la conferencia de prensa de la “Mañanera”, sigue haciendo alusión de no dejarse engañar y presentar las denuncias correspondientes, por medio de la página de la dependencia federal.
Cabe recordar que el año pasado, la institución procedió a clausurar varias bombas en una gasolinera localizada en la cabecera municipal de Cazones, con el argumento de haber detectado la entrega de litros de menos y mantener constante variación en los precios de la Magna.
