De acuerdo con el INAH, se han encontrado restos arqueológicos en los terrenos del nuevo aeropuerto. Desde imágenes de dioses aztecas hasta utensilios que datan del virreinato, más de 170 vestigios arqueológicos se han encontrado en donde se construye el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM). De acuerdo con la información, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) está informado de estos hallazgos y colabora de cerca con los constructores para evitar daños a la zona en la que se han encontrado estos objetos de diversos materiales que ya están bajo resguardo.
Los restos arqueológicos en terrenos del nuevo aeropuerto no interfieren con su construcción, de acuerdo con El Universal, la dirección de Salvamento Arqueológico del INAH emprendió el proyecto “Salvamento Arqueológico al Interior del Lago de Texcoco en su zona Oriente, Estado de México”, programa que estudió los suelos de la zona donde se emprende la construcción del NAIM, y que determinó que que la paraestatal de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) deberá avisar a dicha dependencia cada que se inicie un nuevo trabajo de edificación con la finalidad de evitar una afectación cultural.
De acuerdo con el reporte, los restos encontrados en la zona podrían ser vestigios relacionados con la zona del ejido de Atenco, donde se cree que se estableció un sitio religioso perteneciente a la cultura azteca que, debido a que están bajo resguardo de las comunidades vecinas y no son zona federal, no pueden ser investigadas. Según la información, se presume que estos espacios se construyeron altares donde se colocaban ofrendas dedicadas a varias deidades.
Por el momento, el INAH no ha dado a conocer los restos encontrados en la zona, entre los restos arqueológicos en terrenos del nuevo aeropuerto destacan vasijas con símbolos acuáticos y grecas, figuras femeninas que se creen es la diosa Chalchiuhtlicue, sahumadores con remates de cabeza de serpientes y ranas, así como piezas de obsidiana.
De acuerdo con El Universal, que tuvo acceso a documentos del INAH a través de la Ley de Transparencia, la zona de construcción del NAIM fue dividida en 28 áreas donde se han encontrado vestigios como cerámicas, conchas, huesos, y otros elementos que evidencian la presencia de asentamientos humanos que habitaron la zona hace cerca de mil 800 años. Todo lo hallado se encuentra bajo resguardo y en manos de expertos para su investigación.
Vestigios arqueológicos de la civilización mexica, con al menos mil 800 años de antigüedad, han sido descubiertas dentro del predio donde se construye el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), por lo que diputados federales hacen un llamado para que este patrimonio nacional sea protegido y preservado.
El oficio DGJ/6233/2016 emitido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en respuesta a una solicitud de transparencia, revela que en el predio fueron ubicadas 28 áreas con vestigios arqueológicos mexicas, así como 307 puntos donde se concentran piezas de diversos materiales, como cerámica, lítica, conchas y huesos.
Estos hallazgos revelan la ocupación del área durante la época prehispánica y, de acuerdo con las coordenadas proporcionadas por el INAH, 22 de esos sitios se ubican en los municipios de Atenco y seis en Texcoco, todos dentro del perímetro del NAICM.
Durante una segunda fase de excavaciones, arqueólogos del INAH descubrieron un sitio de carácter ritual perteneciente a la cultura azteca, como altares dedicados a las deidades del agua y de la sal, como vasijas con símbolos de Tláloc la lluvia, y figurillas femeninas con atributos de Chalchiuhtlicue,
Los documentos indican que en la primera etapa se descubrieron y registraron 28 áreas con vestigios, los cuales fueron recuperados y protegidos, además de otros 307 puntos que concentraban materiales como cerámica, conchas huesos, así como otros elementos que revelaron la evidencia arqueológica de asentamientos humanos y explotación de recursos lacustres con una antigüedad de por lo menos mil 800 años.
El INAH destacó las vasijas encontradas con símbolos referentes a Tláloc, vasijas con símbolos acuáticos y con grecas, gurillas femeninas con atributos de la diosa Chalchiuhtlicue, además de sahumadores con remate de cabezas de serpientes, representaciones de rana y navajillas de obsidian.
Actualmente, expertos de esta dirección realizan los análisis de los materiales recuperados en las distintas fases hechas por la investigación en el lago de Texcoco, por lo que hasta el momento se han restaurado 170 bienes de diferentes materias primas, las cuales en su totalidad se encuentran bajo resguardo en las instalaciones de esa dependencia.
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