Papantla, Ver.- En 21 años de Cumbre Tajín, es la primera ocasión que manifestantes son reprimidos con violencia en sus exigencias, siempre han pedido apoyos de programas sociales y obras para sus comunidades, pero ayer, estalló la violencia.
Armados con machetes, decididos a ser escuchados tras haber sido plantados por el gobierno de Xalapa, se apostaron hasta que algún miembro del gabinete llegara a dar una solución a sus demandas.
La Secretaría de Seguridad Pública afirma que se dialogó con el líder; ante su negativa, comenzó el operativo para desalojar la entrada al parque temático Takilhsukut; los manifestantes afirman que jamás la Policía tuvo la intención de tomar acuerdos.
Este hecho mancha de sangre un festival cultural que, aunque se niega a perder sus raíces, ha sido lacerado por el nulo interés por invertir en estas expresiones.
La Policía reprimió con todo, hubo jaloneos, empujones, golpes, mientras que los manifestantes empuñaron sus herramientas de trabajo como armas, incluso periodistas que capturaban los hechos resultaron agredidos por los uniformados.
Golpes de tolete, empujones y hasta patadas de caballo recibieron en este primer día del festival de la identidad tutunakú, hasta hoy, el más desangelado de todos los años.
Trabajo Especial de Rafael Rodríguez
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