ÁLAMO, VER.- Al grito de ¡justicia, justicia!, cientos de habitantes de la colonia Unidad y Trabajo se apoderaron esta noche de la carretera municipalizada para protestar por el atropellamiento y muerte de una familia, y para exigir la detención del conductor multihomicida.
El bloqueo de la vía comenzó alrededor de las 19:30 horas, justo en el sitio donde la noche del sábado murieron trágicamente una niña de siete y años y sus padres, quienes fueron embestidos violentamente por una camioneta Jeep tipo Cherokee, mientras intentaban cruzar la cinta de asfalto.
Y mientras los cuerpos continuaban siendo velados en su domicilio de la calle Antonio M. Quirasco casi esquina con Raymundo Martínez, los manifestantes incendiaban llantas a mitad de la carretera y gritaban a viva voz la aplicación irrestricta de la ley contra quien resulte responsable de la muerte de Raúl Osorio Martínez, Alma Ramírez Torres y la pequeña Leslie Ramírez Torres.
Al punto del bloqueo, que se prolongó hasta las 22:00 horas, acudió el alcalde Jorge Vera Hernández y algunos de sus más cercanos colaboradores para dialogar con la turba y comprometerse a demandar justicia para los occisos.
Sin embargo, algunas personas alcoholizadas y otras coléricas por lo ocurrido la noche anterior empezaron a tornarse violentas, al grado que por lo menos una unidad de Protección Civil fue dañada a pedradas por individuos que hasta entonces no habían sido identificados.
Todavía más, el encuentro entre el presidente municipal y los enfurecidos inconformes se salió de control, tanto que uno de los asistentes, al parecer en estado de ebriedad, lanzó un proyectil hacia donde se encontraba Vera Hernández y alcanzó a otro de los manifestantes (identificado como Santos Hernández, de 47 años) quien cayó desvanecido sobre el lodoso pavimento.
La situación provocó que otra persona acudiera a reclamarle al autor del atentado y se desató una riña que terminó con otro lesionado (con sobrenombre de “El Topo”). Fue necesario el arribo de socorristas para atender a ambos heridos y conducirlos al hospital general.
Tras los incidentes, el alcalde se retiró del lugar y en su lugar se quedó a dialogar el director de Desarrollo Social y Humano, Roberto Cortez Hernández, quien se comprometió a atender a la brevedad posible cinco peticiones de los inconformes: apoyar de manera permanente a la madre de la difunta Alma (doña Concepción Torres), rehabilitar o reconstruir el puente a desnivel que se encuentra en pésimas condiciones, rehabilitar el tramo carretero dañado, instalar alumbrado público y apoyar en la exigencia de justicia ante la fiscalía para las personas fallecidas.
Cabe destacar que, a pesar de la violenta situación, no hubo presencia policiaca para resguardar el orden, por lo que hubo temor de que la protesta aumentara.
Durante más de dos horas la carretera federal Tihuatlán-Álamo-Alazán quedó cerrada al tránsito vehicular, hasta que al filo de las 22:00 horas la situación se normalizó.
