Con-ciencia

Por: Lic. Gabriel del Ángel

Al mencionarte la palabra fe, normalmente la relacionas con la creencia en una religión o Dios, sin embargo al hablarte de la fe no me estoy refiriendo a tus creencias religiosas, sino a cómo la fe te puede ayudar según la neurociencia a obtener una mejor  calidad de vida, principalmente desde el punto de vista de tu salud, un ejemplo claro seria  cuando alguien que se encuentra enfermo y mantiene su fe en que  va a sanar, esa fe crea una confianza en su mente que le ayuda a lidiar con mayor facilidad su enfermedad y a recuperarse más rápido.

 La fe es algo que ha acompañado al hombre desde hace millones de años, es una ventaja evolutiva, la fe en sí es una creencia en algo o en alguien del cual no lo podemos probar o demostrar, sin embargo la fe te hace creer, pero no es tan fácil creer o tener fe, ¿porque no todos pueden desarrollar esta cualidad?, bien el cerebro tiene una parte llamada lóbulo frontal, este se encarga de desarrollar el razonamiento en el individuo y normalmente ese razonamiento  impide que la fe se desarrolle o fortalezca, por eso una inmensa mayoría de intelectuales y científicos dudan de la existencia de un ser superior, pues su razonamiento no les da cabida a una fe religiosa, aun así ese intelectual o científico profesa la fe en lo que ha estudiado o comprobado a través de sus experimentos, sin embargo como la misma ciencia lo dice al referirse acerca de la fe o un ser superior, que  la falta de prueba de existencia no es prueba de inexistencia , esto significa que el hecho de no poder probar la existencia de un ser superior no quiere decir que no exista; pero veamos que nos dice la neurociencia en el área del cerebro  donde radican la fe y los sentimientos. El hecho de que no haya una parte que percibe la posibilidad de la existencia de un origen del todo , de Dios o de las primeras causas, no implica que no exista, un ejemplo sencillo es lo salado o dulce, existe porque lo tocas con la lengua, sin embargo ¿existe lo salado o dulce para una serpiente? no, para nosotros sí, porque lo percibimos. La fe es una forma de conocimiento  biológico evolutivo, en la cual das por cierto algo de lo cual no solamente no tienes pruebas, lo más destacado es que no te hace falta probarlo, porque lo sientes dentro de ti mismo.

El lóbulo frontal del cerebro promueve la fe como acto de voluntad y de  intención, como algo que esta fuera de uno, pero que te va ayudar y sobre todo te va a dar algo muy importante llamada confianza.

Mucho ha estudiado la neurociencia el efecto de la fe en la salud del ser humano, se han hecho experimentos donde se mide la tensión o estrés de individuos con creencias religiosas diferentes, estos fueron examinados antes de entrar a un templo religioso y se volvió a medir en estos  cuando salían las sustancias en sangre y funciones cerebrales y se demostró que estos individuos lograron en un rato bajar las sustancias toxicas en sangre, así como el aumento de un 17 % de oxitocina, que es la que se encarga de darnos confianza en algo o alguien,  generando paz, serenidad y tranquilidad en cada uno de ellos, además de la activación de ciertas áreas del cerebro que se activan con la oración y canticos religiosos, encontrándose también estos mismos efectos en aquellos que ´practican una disciplina espiritual como la meditación, relajación o el yoga.

 Es el hemisferio derecho el que se especializa en corporizar la noción emocional de la existencia de un ser superior a nosotros, en el radica la ensoñación, la espiritualidad, la música, la creatividad, la imaginación, lo holístico, todo esto tiene que ver más con las funciones derechas. Contrariamente el hemisferio izquierdo trabaja  lo lógico, matemático, el razonamiento, sentido común, es una computadora de las más evolucionadas.

La neurociencia nos dice que la gente con fe vive mejor, vive más tiempo y son más felices que los no creyentes, esta afirmación es meramente científica. La fe le da al individuo un refuerzo mental y espiritual, hay datos científicos que prueban el mejoramiento de la salud de un individuo enfermo con fe,  en comparación con uno sin fe.

En los Estados Unidos de Norteamérica se llevó a cabo un experimento en un convento, en el cual las monjas que lo habitaban  decidieron donar sus cerebros después de morir para que fuesen estudiados por la comunidad científica,  los resultados encontrados fueron sorprendentes, pues cada una de las donantes llevaron un estilo de vida similar dentro del convento, es decir comían, bebían y tenían actividades similares todas ellas. Este experimento llevo décadas, pues anualmente eran evaluadas y examinadas con exámenes de memoria e imágenes cerebrales, lo que reflejaba el estado mental en que se encontraban. Sin embargo en el examen post mortem que se llegó a realizar por parte del equipo de patólogos, a simple vista arrojaba que algunas de ellas padecieron Alzheimer, pues sus cerebros tenían todas las características de esa enfermedad, el Alzheimer tiene características especiales pues se produce acumulación de proteínas entre las neuronas, cambios intracelulares, intraneuronales y esto tiene una repercusión macroscópica, esto quiere decir que alguien con un cerebro atrofiado o desgastado al ser revisado por un patólogo a simple vista  puede decir, este cerebro tuvo Alzheimer. Sin embargo ese análisis o resultado de Alzheimer contradecía el estado mental en vida de estas monjas, pues dicha enfermedad nunca se manifestó en ninguna de ellas, esto llamo la atención de los científicos y fueron a ver qué pasaba o cual era la razón por la que dicha enfermedad no se manifestó en vida en esas monjas, encontraron que dichas monjas tenían una experiencia emocional más positiva, es decir veían el vaso medio lleno y no medio vacío,  tenían mas capacidad gramatical y de expresión, habían viajado mucho, su vida la llevaron con mayor interacción social, eran personas sumamente agradecidas, todos estos aspectos protegieron al cerebro enfermo de las monjas. ahí apareció el termino de reserva cognitiva, pues aun un cerebro enfermo puede reaccionar de manera diferente si ve las cosas de manera positiva, si emocionalmente es más positivo, si esta mas conectado socialmente,  en este último punto como ya hemos mencionado anteriormente el aislamiento mata a cualquiera, ya que el cerebro es un órgano social.

En conclusión, en general más allá de las creencias religiosas que tengas o la práctica espiritual que practiques, la fe nos dice la neurociencia hace muy bien a la salud de quien la práctica.

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Con el mejor de mis deseos porque seas feliz, perfectamente saludable y libre de todo sufrimiento.

NAMASTE

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