Ciudad de México.– La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) descartó que la explosión de una pipa de gas ocurrida el pasado 10 de septiembre en el Puente de la Concordia haya sido provocada por baches, fallas en la unidad o defectos en la carpeta asfáltica. Así lo informó la fiscal capitalina, Bertha Alcalde Luján, durante una conferencia de prensa celebrada en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento.
A 20 días del accidente, que ha dejado hasta ahora 31 personas fallecidas, los peritajes realizados por especialistas de la FGJ-CDMX concluyeron que el siniestro fue consecuencia de una pérdida de control del conductor al incorporarse a la autopista México-Puebla, específicamente al tomar una curva.
“El accidente no fue provocado por un bache. Se acreditó que la carpeta asfáltica estaba en condiciones adecuadas, sin daños que pudieran generar un percance de esta magnitud”, señaló Alcalde Luján. “Es falso también que se haya pavimentado esta vía posterior al accidente”, agregó.
Asimismo, las inspecciones al tractocamión y a la pipa no revelaron fallas mecánicas en llantas, frenos, ejes, válvulas ni otros componentes. Las válvulas del sistema de gas se encontraban cerradas y funcionando correctamente; la fuga se originó tras el impacto, cuando la pipa se ladeó y la fricción con el muro generó una hendidura en su parte superior.
Según los datos de telemetría GPS proporcionados por la empresa propietaria del vehículo, la unidad ingresó a la curva a una velocidad de entre 44 y 46 km/h, lo cual coincide con los cálculos de los peritos en mecánica y tránsito terrestre.
La investigación cuenta con la participación de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) para fortalecer los elementos técnicos y esclarecer plenamente la causa del accidente.
Finalmente, la fiscal anunció que la próxima semana se harán públicos los resultados de esta primera etapa de la investigación.