Ductos corroídos en el CPG

El bulevar Jesús González Ortega cruza la División de Oriente, frontera entre Coatzintla y Poza Rica, si al bajar del distribuidor vial se sigue la inercia de la vía, el transeúnte y/o automovilista encontrará de un lado la planta criogénica y del otro el complejo procesador de gas donde se produce el gas etileno y el gas natural. Es un complejo activo, ya que cubre las necesidades gaseras de la región.

Sin embargo, en un recorrido que hizo La Opinión para reconocer las instalaciones, se pudo observar que las estructuras que detienen tuberías que llevan gas están en condiciones de deterioro absoluto convirtiéndose en una bomba de tiempo para los pozarricenses.

Todos, desde el distribuidor vial, el quemador de torre que se ubica dentro de este complejo procesador de gas, además de regalarnos rojos atardeceres y postales representativas de Poza Rica, nos advierte que aún está en producción.

El quemador de torre es un indicio de que la función de refinamiento de gas está en proceso, es un indicio de vida productiva. Sin embargo, pese a que aún está activo el complejo, las instalaciones se encuentran en condiciones paupérrimas.

Esto se debe a que desde hace un par de años, PEMEX ha reducido su gasto de manera considerable recortando el presupuesto que se utilizaba para el mantenimiento general de las instalaciones.

Incluso, en la zona residencial del interior del campo, La Opinión reportó la semana pasada que el pasto se encuentra visiblemente crecido y que vecinos tienen que cooperar para pagar el mantenimiento a esta zona que antes estaba a cargo de PEMEX.

Sin embargo, lo que sucede con las instalaciones que llevan consigo gas es una situación mucho más compleja, ya que lo que sostiene las tuberías está en visible deterioro y a punto del colapso, lo que advierte que si no se resuelve a la brevedad podría ocasionar una tragedia.

La crisis de la exparaestatal, dicen algunos de los trabajadores, no solamente se refleja en la pérdida de nómina, sino en escenarios que pueden significar una bomba de tiempo para los habitantes de Poza Rica.