Tihuatlán, Ver.- Sin las ventas ni demanda de elaboración de muebles de otros años, el gremio de carpinteros atraviesa actualmente por una de las crisis más fuertes de los últimos tiempos, luego de la pasada transición de año nuevo.
De hecho, a un mes del inicio de 2019 los trabajadores de este sector temen que tendrán que esperar varios meses para levantar su economía, pues regularmente las ventas de muebles o las solicitudes para elaborarlas ocurren en los últimos meses de cada año.
“Ahorita estamos trabajando como a un treinta por ciento de nuestra capacidad”, dijo Víctor Hernández Enríquez, miembro de la Unión de Propietarios de Talleres de Carpintería de Tihuatlán, pues la demanda de muebles es escasa.
Por si eso fuera poco, la presencia en la región de vendedores de muebles que arriban del estado de Hidalgo también incide en la baja demanda de sus artículos y productos, a pesar de que la calidad de esos muebles que traen de otros lugares no se compara con los de Tihuatlán.
Reveló que la Unión de carpinteros integra alrededor de veinticinco socios, pero en la villa tihuateca y su periferia debe haber más de doscientos trabajadores que se dedican al arte de la madera.
Destacó que la actividad de los carpinteros es uno de los puntales de la economía de la cabecera municipal, y por ende cuando ellos no tienen trabajo la crisis se acentúa en la villa.
Todavía más, Hernández Enríquez anotó que algunas mueblerías de esta localidad expenden muebles traídos de ciudades lejanas, donde las compran baratas para revenderlas, pero a veces ni siquiera son de madera de cedro.
En este escenario, sostuvo, los trabajadores del gremio analizan la posibilidad de acudir a instancias como la Secretaría de Economía para plantear proyectos productivos mediante los cuales puedan bajarles apoyos para la adquisición de equipo e insumos, y de esa forma re impulsar la producción y comercialización de muebles.
Subrayó que en su trayectoria como trabajador de la madera nunca ha sabido que hayan tenido apoyos mediante proyectos productivos.
