CIUDAD DE MÉXICO.- Un día como hoy, hace dos años, fue develada en el Paseo de la Reforma una réplica de la escultura de La Joven de Amajac, símbolo de la resistencia indígena, en un acto que reunió a representantes de pueblos originarios de Veracruz y la Ciudad de México.
Ubicada en el sitio donde antes se encontraba la estatua de Cristóbal Colón, esta figura encontrada en Álamo Temapache representa la lucha, la memoria y la identidad de los pueblos originarios. La escultura original fue hallada en el municipio de Álamo Temapache, en el norte de Veracruz, y su descubrimiento generó un fuerte simbolismo al colocarla en uno de los espacios más visibles y transitados de la capital.
La glorieta donde se encuentra La Joven de Amajac también ha sido adoptada por otras expresiones ciudadanas que coinciden en la necesidad de visibilizar las luchas históricas desde los márgenes hacia el centro.
Desde su tierra de origen, comunidades veracruzanas siguen sintiendo orgullo por esta figura que ahora forma parte del paisaje urbano de la capital. Su presencia recuerda que la historia y la transformación social también emergen de lo profundo del país.
















