El nombre Flyman no parecía bastante espectacular. Entonces pensé en Mosquit Man y luego pronuncié Spider-Man y eso sonaba realmente bien”, recordó.
El artista, que quería innovar, había imaginado que el héroe sería un adolescente con “muchos problemas personales”.
“No tendría dinero suficiente, viviría con su tía enferma, de la cual tendría que ocuparse, y, además, tendría que combatir a los malos”, dijo Lee, al recordar la primera vez que presentó el proyecto a su jefe.
“Stan, es la peor idea que he escuchado”, le respondió el editor. “Un superhéroe es evidentemente un adulto que no puede permitirse tener problemas”, recordó Lee que le dijo el editor.
Además “la gente detesta a las arañas: ¡nunca se llamará Spider- Man”, agregó el editor, según recordó Lee.
















