Silencio que aturde antes del voto por voto

POZA RICA EN MEDIO DE LA VIOLENCIA

La política, como el ajedrez, tiene movimientos que anticipan desenlaces. Y en Poza Rica, la partida aún no termina. La Sala Regional Xalapa del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación dio un paso importante al confirmar que el Tribunal Electoral de Veracruz actuó conforme a derecho, al permitir que Adanely Rodríguez, candidata de Morena, solicitara el recuento total de los votos. Un movimiento clave, legal y legítimo.

Con esta resolución, se desmoronan los argumentos de Emilio Olvera, el alcalde electo –al menos por ahora–, y se sienta un precedente. Es decir, las candidaturas no deben pagar por las fallas o irregularidades cometidas por los partidos que las postulan. Es una distinción jurídica y política que fortalece el respeto al voto y a la voluntad ciudadana.

Adanely Rodríguez no pidió más de lo que le corresponde: transparencia y certeza. Exigió, con razón, que se revisen los votos uno por uno, en un proceso donde los márgenes fueron estrechos y las dudas, amplias. En democracia, eso no solo es válido… es necesario.

Mientras tanto, el silencio de Emilio Olvera se ha vuelto estruendoso. ¿Acaso presiente un revés? Porque no es menor lo que está en juego: es nada más y nada menos que el posible cambio del resultado final de la elección municipal.

Y aunque su equipo ha intentado mantener la calma, hay quienes dicen que, puertas adentro, la tensión es palpable. La guerra sucia en redes sociales ha bajado de intensidad, pero no por una tregua voluntaria, sino por el desgaste que provocaron las propias declaraciones de Emilio Olvera.

Acusaciones directas y altisonantes contra la gobernadora Rocío Nahle, contra el delegado de Bienestar, Juan Javier Gómez Cazarín, y el dirigente estatal de Morena, Esteban Ramírez Zepeta, a quienes llamó “delincuentes”, no pasaron desapercibidas y le costaron puntos valiosos ante la opinión pública.

Muchos ciudadanos se preguntaron: si eso dijo del poder político más alto del estado, ¿qué podría pasarle a un ciudadano común desde la alcaldía si se le ocurre ir en contra o reclamarle algún derecho al alcalde?

El proceso sigue, y la expectativa crece. El recuento será la última palabra, al menos en esta etapa, para confirmar quién será el próximo alcalde de Poza Rica. Lo cierto es que hoy, la narrativa cambia de “ya ganamos” a “esperemos los resultados oficiales”. Porque en democracia, el conteo final sí importa, ¡y mucho!