Sheinbaum presenta plan para rescatar Pemex

Sheinbaum presenta plan para rescatar Pemex

El plan contempla una inversión pública y privada de hasta 250 mil millones de pesos mediante un vehículo financiero; inversión, gasoductos y autosuficiencia en 2027.

El gobierno de Claudia Sheinbaum presentó el Plan Estratégico 2025‑2035 para Petróleos Mexicanos, con miras a consolidar su autonomía financiera y operativa antes de 2027. La estrategia se asienta en tres pilares: desarrollo social vinculado a la producción energética, respaldo financiero de Hacienda para aliviar obligaciones, y un esquema de inversión pública para proyectos productivos en 2025.

Como parte del plan, se anunció la creación de un vehículo de inversión respaldado por el gobierno con capacidad para movilizar hasta 250 mil millones de pesos durante 2025, complementado por una emisión de deuda por 12 mil millones de dólares para cubrir obligaciones inmediatas.

Una pieza clave es la expansión de la red de gasoductos en el sureste, especialmente en los estados de Oaxaca y Tabasco, con los proyectos Interoceánico, Conexión Maya y Coatzacoalcos II, destinados a gasificar comunidades, impulsar polos productivos y garantizar soberanía energética.

En materia de producción, Pemex se planteó mantener un nivel de 1.8 millones de barriles diarios de crudo, además de incrementar la producción de gas natural a 5 mil millones de pies cúbicos diarios. También se busca expandir la petroquímica y fertilizantes, rehabilitar refinerías clave como Tula, Salina Cruz y Dos Bocas, y reforzar la infraestructura logística.

En lo fiscal, se implementará el nuevo régimen llamado «Derecho Petrolero para el Bienestar» con una tasa del 30 % para petróleo y 11.63 % para gas no asociado, lo que permitirá liberar recursos para inversión y equilibrar las finanzas de la empresa.

Pemex enfrenta actualmente una deuda estimada en alrededor de 99 mil millones de dólares. Con la estrategia anunciada, se proyecta una reducción a 88.8 mil millones en 2025 y a 77.3 mil millones en 2030, en un esfuerzo por alcanzar la estabilidad financiera.

El plan ya obtuvo señales de respaldo por parte del mercado: la agencia Fitch mejoró la calificación crediticia de Pemex a “BB”, tras observar la reforma financiera, fiscal y operativa impulsada por el gobierno.