Queman piñata con la imagen del gobernador Rubén Rocha Moya durante marcha por la paz en Culiacán, Sinaloa
Culiacán, Sinaloa. – Durante una marcha por la paz realizada el pasado fin de semana en Culiacán, un grupo de manifestantes prendió fuego a una piñata con la imagen del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya (@rochamoya_). La acción, que generó gran revuelo entre los asistentes y la comunidad, fue parte de una protesta por la creciente violencia en la región.
La marcha, organizada por colectivos sociales y ciudadanos preocupados por la inseguridad, recorrió varias calles del centro de la ciudad. Al final del evento, un grupo de manifestantes procedió a colgar la piñata que representaba al gobernador, para luego prenderle fuego frente a una multitud que observaba en silencio.
La piñata, que llevaba el rostro de Rubén Rocha Moya, fue vista como una forma simbólica de protesta contra las políticas de seguridad del gobierno estatal. Los organizadores de la marcha manifestaron que su intención no era atacar de manera personal al gobernador, sino expresar el malestar de la población por la situación de violencia que afecta a Culiacán y otros municipios del estado.
«Queremos que el gobierno escuche a la gente. La violencia en Sinaloa está fuera de control, y necesitamos una respuesta más efectiva», declaró uno de los participantes en la manifestación, quien prefirió mantenerse en el anonimato por motivos de seguridad.
El acto de quemar la piñata fue interpretado por algunos como una crítica directa a la falta de avances en la lucha contra el crimen organizado en el estado, así como una demanda por una mayor seguridad y justicia para las víctimas de la violencia.
Hasta el momento, el gobernador Rubén Rocha Moya no ha emitido comentarios públicos sobre el incidente. Sin embargo, su administración ha enfrentado diversas críticas relacionadas con la estrategia de seguridad, particularmente en los últimos meses, cuando se han registrado aumentos en los índices de violencia en distintas regiones del estado.
A pesar de la controversia, los organizadores de la marcha subrayaron que su protesta fue pacífica y que su único objetivo era llamar la atención sobre la crisis de seguridad que afecta a las familias sinaloenses.
«Queremos un Sinaloa en paz, donde podamos vivir tranquilos y sin miedo», concluyó otro de los manifestantes, antes de que la marcha se disolviera.
La quema de piñatas con figuras públicas ha sido una práctica común en México como parte de manifestaciones y protestas sociales, siendo un acto simbólico que refleja el descontento hacia figuras de poder. Sin embargo, en esta ocasión, la acción ha generado un fuerte debate sobre el clima de inseguridad y el papel del gobierno estatal en la lucha contra la violencia.