Tras comprar una vivienda en el fraccionamiento Cabo Rojo cerca de 700 familias viven un calvario por mala calidad de las casas, calles que comienzan a destruirse por el acceso de unidades pesadas y la falta de alumbrado público.
Las familias que habitan ese conjunto habitacional culpa de la mala calidad de las casas y el deterioro de las calles a la empresa constructora Convives que es la encargada del proyecto inmobiliario que se realiza en esa zona de la colonia Anáhuac.