Alcaldesa, en la mira por malversación de fondos

Alcaldesa, en la mira por malversación de fondos

“Cualquiera que robe al pueblo enfrentará la justicia”, señala Sheinbaum; Lilia Arrieta presenció el discurso en el Zócalo, mientras enfrenta señalamientos por millonario daño patrimonial.

Hipólito Moreno Tapia

Álamo, Ver.- La frase con la que Claudia Sheinbaum selló uno de los momentos más contundentes de su informe de gobierno de este domingo cayó como balde de agua fría sobre varios actores políticos, en especial, sobre la alcaldesa morenista de Álamo Temapache, Blanca Lilia Arrieta Pardo, quien estuvo entre los asistentes en el Zócalo capitalino.

“Quien traicione al pueblo, quien robe al pueblo, enfrentará la justicia”, dijo Sheinbaum, al reafirmar su compromiso con la honestidad y el combate a la corrupción. La mandataria nacional advirtió que el poder no es para enriquecerse, sino para servir con humildad, y subrayó que los recursos públicos deben ser sagrados.

Las palabras resonaron incómodamente para la presidenta municipal de Álamo, cuya administración se encuentra en el ojo del huracán luego de que el Órgano de Fiscalización Superior del Estado (ORFIS) revelara un presunto daño patrimonial de más de 22 millones de pesos en la Cuenta Pública 2024.

Según el informe del ORFIS, Álamo Temapache ocupa el cuarto lugar estatal por irregularidades financieras, y es el número uno en toda la zona norte de Veracruz. Las observaciones apuntan a obras sin documentación técnica, proyectos mal justificados, construcciones inexistentes y gastos millonarios sin sustento.

Para muchos, la alusión de Sheinbaum fue directa, aunque sin nombres. El mensaje de cero impunidad se produce mientras en Álamo Temapache se acumulan reclamos ciudadanos para que el gobierno de Blanca Lilia Arrieta rinda cuentas y se proceda conforme a la ley, de comprobarse los señalamientos.

La presión no solo viene de los entes fiscalizadores, sino también de una ciudadanía cada vez más crítica que exige que el discurso de no robar se traduzca en acciones claras contra quienes lo infringen, sin importar su filiación política.