El presidente de Irán, Hassan Rouhani, acusó a Estados Unidos de ser “el pináculo del terrorismo global”.
Rouhani respondió así al hecho de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, designara el lunes a la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) como “organización terrorista”.
En un discurso trasmitido en vivo a través de la televisión estatal, Rouhani se preguntó: “¿Quienes son ustedes para clasificar a las instituciones revolucionarias como terroristas?”
“Ustedes son los que quieren utilizar a los grupos terroristas como herramientas contra las naciones de la región… Ustedes son los líderes del terrorismo mundial”, afirmó.
El mandatario iraní salió a la defensa de los miembros de la CGRI al asegurar que “han sacrificado sus vidas para proteger a nuestro pueblo, a nuestra revolución (islámica de 1979)… de los Estados Unidos, que le guarda rencor a la Guardia”.
Sanciones y represalias
En una medida sin precedentes, el gobierno de Trump designó por primera vez a una fuerza militar de otro país como una organización terrorista.
Clasificar a la CGRI como terrorista le permite a Washington aplicar más sanciones, particularmente las que afectan el sector empresarial, dado que la CGRI está vinculada a la economía iraní.
Varios integrantes de ese cuerpo élite, así como algunas entidades afiliadas, ya han sido objeto de sanciones por supuestas actividades de proliferación, apoyo al terrorismo y abuso de derechos humanos.
“Este paso sin precedentes, encabezado por el Departamento de Estado, reconoce la realidad de que Irán no sólo es un Estado promotor de terrorismo, sino que la CGRI activamente participa en, financia y promueve el terrorismo como estrategia de gobierno”, dijo Trump el lunes.
En represalia, Irán declaró al Comando Central de EE.UU. -las fuerzas armadas estadounidenses en Medio Oriente- como una organización terrorista y al gobierno de Washington como un promotor de terrorismo.
Rouhani dijo que EE.UU. había cometido un error con una decisión que “unirá a los iraníes y la Guardia se volverá más popular aún”.
Otros funcionarios iraníes advirtieron que la iniciativa de Trump haría peligrar los intereses de Washington en la región.
La declaración del presidente Trump sucede después de que retirara a EE.UU. de un acuerdo multilateral que prevé el relajamiento de estrictas sanciones económicas contra Teherán a cambio de que frenara su programa nuclear.
Teherán ha amenazado con reiniciar su desarrollo atómico si los otros cosignatarios del pacto no protegen sus intereses.
