Tribuna Central

Por José Luis Pacheco Espinoza

Dicen que el peor enemigo de un mexicano es otro mexicano, y vaya que un comentarista deportivo de TV Azteca se encargó de decir que no había que culpar al arbitraje en la derrota de los Tigres ante el Bayern Múnich, que la Liga MX es de Segunda División y no se puede comparar entre sí a ambos equipos, porque el alemán vale 14 veces más que lo que vale el Tigres de México.

Y sí, nuestro futbol es muy distinto al europeo, eso me queda claro, pero en la cancha se gana con goles y el Bayern no fue capaz de hacerle los 8 que le metió al Barcelona o los 9 que en una ocasión le metió al Real Madrid. Antes claro, no le voy a los Tigres en la Liga MX.

Yo no vi a unos Tigres asustados o encerrados, vi a los Tigres como siempre han jugado; yo en ocasiones los he criticado porque no me gusta el sistema de juego defensivo que tiene implementado Ricardo «Tuca» Ferretti, prefiero, como muchos, el futbol ofensivo, de constantes llegadas en ambas porterías.

Tigres recibió el intenso embate ofensivo de Bayern, que no cesó de ir hacia adelante, la calidad de sus jugadores es innegable, por eso están en un equipo tan grande y con sueldos estratosféricos, vaya, previamente se dijo que el polaco Robert Lewandowski vale él solo lo que vale toda la plantilla de los Tigres, esa es una razón que podría justificar que las casas de apuestas ofrecían grandes ganancias a quienes se atrevieran a apostar que Bayern le metería 8 goles a Tigres.

Lo que no escuché en las críticas de los expertos comentaristas de futbol que tenemos en la televisión, es que hablaran sobre la mano que no se marcó a favor de Tigres, que fue dentro del área y era un penal clarísimo; el defensivo de Bayern al barrerse sobre Quiñones detuvo el balón con su cuerpo y, al caer sentado, el balón le pegó en la mano, se pudiera decir que no hubo intención, que “el balón fue a la mano”, con el defensivo sentado le quedaría el balón a modo a Quiñones para continuar la jugada y tirar a gol, pero con el contacto con la mano del defensivo el balón quedó cómodo para que Bayern saliera jugando sin problema y así fue nulificada la ofensiva de Tigres. El árbitro estaba cerca de la jugada y no se atrevió a marcar el penal, simplemente no se atrevió, ¿el VAR? calló.

Y el gol del triunfo que anotó Benjamin Pavard fue porque le cayó a modo el rebote que venía de la mano de Robert Lewandowski, precedido por si fuera poco de un fuera de lugar y de una carga aérea sobre el portero, además de que el árbitro debió ir al VAR, no fue y aún así revocó su decisión, porque antes había marcado fuera de lugar; eso no lo comentaron para nada los expertos en futbol, en fin, entiendo que los Tigres no son el equipo favorito de ellos, pero aquí se trata de un tema de imparcialidad y de análisis profesional, no cargarse hacia alguno, sino dimensionar las cosas como son, así de sencillo.

Por cierto, ellos anuncian con bombos y platillos que ya van a televisar partidos de la Champions, ¿eso es un triunfo?, juegos de la Champions siempre los hemos visto, televisados por otras empresas, pero siempre han pasado, me gustaría que mejor hicieran convenio con la Liga Mexicana de Beisbol o con la Tercera División Profesional, donde está el semillero de jóvenes futbolistas mexicanos y transmitieran algunos partidos, eso sí sería un triunfo y algo trascendente, muy novedoso, interesante, y de mucho ruido para la audiencia televisiva de nuestro país, de futbol internacional ya está inundada la televisión, cuando hay partidos hasta en dos o tres canales distintos los podemos ver, vaya, hasta partidos atrasados pasan constantemente. Bueno, es mi punto de vista.

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