álamo, Ver.- Por esquivar uno de tantos baches existentes en la carretera federal, un residente de esta ciudad estuvo a punto de perder la vida la mañana de este viernes, al salirse del camino mientras retornaba del ejido Tierra Blanca Boxter; terminó con una herida cortante en el cráneo, en tanto que su carro quedó empinado en la desembocadura de una alcantarilla.
El accidente se suscitó a las 07:20 horas a la altura del paraje conocido como El Nueve, entre los ejidos Adalberto Tejeda y Hermenegildo Galeana, luego de que el lesionado, Juan Carlos Hernández Olivares, de 33 años, habitante de la céntrica calle Magnolia número 20, regresaba de haber ido a dejar a su esposa a su centro de trabajo en la planta procesadora INDUMESA.
Hernández Olivares conducía un automóvil Chevrolet, tipo Chevy Monza, color rojo, con placas de circulación YGP-52-78 de esta entidad.
En su versión, él retornaba hacia su domicilio en el centro de la ciudad, hasta que al llegar a la altura del km 41 + 300 perdió el control, presumiblemente al pasar un bache, que terminó con todo y vehículo en la desembocadura de una alcantarilla que atraviesa la carretera federal Álamo-Alazán.
Tras perder el control de su vehículo, Juan Carlos se golpeó la cabeza y sufrió una laceración en el cráneo, a la altura del parietal derecho, lo que le propició sangrado que acabó manchando su ropa sobre el hombro del mismo lado.
Su unidad, en tanto, terminó completamente inclinada, con su parte frontal sobre una alcantarilla y sus llantas traseras sobre la orilla de la carpeta de asfalto.
El lesionado, fue atendido por paramédicos del grupo Emergency Medical Services (EMS), en cuya ambulancia fue trasladado al hospital general para su valoración médica.
Por su lado, elementos de Protección Civil se apostaron en la zona para abanderar y recomendar precaución a los demás automovilistas que pasaban por el lugar, con el propósito de prevenir más accidentes.
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