Por unanimidad, la Comisión decidió expulsar a Miguel Ángel Yunes Márquez y Miguel Ángel Yunes Linar
Ciudad de México.– En una resolución histórica y sin precedentes, la Comisión de Orden del Partido Acción Nacional (PAN) decidió, por unanimidad, expulsar a los exgobernadores Miguel Ángel Yunes Linares y su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez del instituto político. La decisión se tomó tras una serie de investigaciones internas que, según fuentes cercanas al proceso, determinaron la violación de los principios y valores que rigen al partido.
La resolución de la Comisión de Orden del PAN, que se lleva a cabo en un contexto de renovación interna y redefinición de su identidad política, ha causado un gran revuelo dentro del ámbito político y en las filas del propio PAN, dado que los Yunes son figuras prominentes en la historia reciente del partido, particularmente en el estado de Veracruz.
La expulsión de los Yunes, que se hizo efectiva el día de hoy jueves, se enmarca dentro de una serie de eventos que han puesto bajo escrutinio la lealtad y el compromiso de los miembros del partido con los principios democráticos y de ética política. De acuerdo con los miembros de la Comisión de Orden, los Yunes Linares y Yunes Márquez habrían incurrido en diversas conductas incompatibles con los valores que promueve el PAN, como la falta de unidad con las estructuras del partido, el uso de recursos públicos para fines personales y, sobre todo, una serie de actitudes que se consideraron contrarias al rumbo que el PAN busca para su futuro.
El presidente del PAN, Marko Cortés, quien había evitado pronunciarse públicamente sobre el tema hasta el momento, aplaudió la decisión de la Comisión y destacó que esta acción refleja el compromiso del partido con la transparencia, la rendición de cuentas y el fortalecimiento de sus principios fundacionales.
La medida representa un paso más en la reconfiguración del PAN, que busca recuperar la confianza de los ciudadanos tras los recientes fracasos electorales y la creciente fragmentación interna. El partido se encuentra en un proceso de redefinición de su liderazgo y valores, con miras a las elecciones presidenciales de 2024, donde el papel de las alianzas será crucial para enfrentar al partido gobernante, Morena.