Al grito “no somos una, no somos cien, somos estancias, cuéntanos bien”, tanto maestras y madres de familia, realizaron una marcha por calles céntricas de la ciudad, para exigir que el gobierno federal, regrese el subsidio que recibían mensualmente, para mantener las estancias infantiles, que apoyan a mujeres trabajadoras, en el cuidado de sus hijos.
Con pancartas en mano, donde exigen el pago correspondiente al mes de enero, alrededor de 100 mujeres, caminaron la mañana del miércoles, desde el tranvía del recuerdo hasta el zócalo de la ciudad.
Explicaron que la desaparición de las estancias infantiles, pone en riesgo la seguridad de cientos de niños y las madres trabajadoras ya no tendrían un lugar donde puedan cuidar a sus hijos mientras se ganan el pan de cada día.
María Eugenia Rabanales Mendoza, encargada de la Estancia Infantil Alfa y Omega, ubicada en la calle de Pensador Mexicano, Número 174 de la colonia Miguel Ángel de Quevedo de esta ciudad, dijo que ante la falta de solvencia económica, se han visto obligadas a despedir personal y reducir gastos.
También reconocieron la existencia de dos guarderías de este tipo, en la conurbación Veracruz-Boca del Río, con niños fantasmas, que eran creadas fast track y a la fecha ya cerraron sus puertas.
“Te voy a decir cual es la parte que nosotros veíamos, que de un día para otro, nos abrían una estancia, en un lugar no permitido y la estancia que se veía afectada se quejaba y el argumento de las autoridades, era que ya estaba dada y se desconocía quien era la responsable, porque nunca acudía a las reuniones y nos enteramos que esas estancias estaban llenas de niños, hoy abrían y a fin de mes ya estaban llenas de niños, cosa que nosotros con 12 años de existencia no podíamos lograr, si vimos las estancias y podemos presumir que son las estancias fantasma, esas de un día para otro ya cerrarón, nadie sabía quien eran los dueños, pero ya cerraron”, comentó.
La entrevistada dijo que en el puerto de Veracruz, existían entre dos o tres estancias infantiles, que se presumía eran patito.
“Vamos a hablar de lo que nosotros veíamos, eran dos o tres, unas en la zona VIP, por Costa de Oro, por la zona norte y la de la zona VIP, ya no es estancia y sigue trabajando de manera particular”, comentó.
Explicó que las estancias infantiles cuentan con reglas de operación que ya no eran respetadas, es decir, en un perímetro de 50 metros, no debería existir otra.
“Si querías abrir una estancia en el tranvía, necesitabas checar que en un perímetro de 50 metros, no hubiera otra y lo que pasó en los últimos años es que en un perímetro de 4 y 5 metros, ya abrían otras”, comentó.
Citaron como ejemplo que las irregularidades se registraban al interior de la Secretaria de Desarrollo Social (Sedesol), ahora Secretaria del Bienestar, donde se capturaban las listas de los niños y niñas de las estancias infantiles.
“Eso lo manejan dentro de la misma coordinación, hay gente que se dedica a subir la lista, hay una nube de niños, yo reporto que de 30 niños, tres ya no llegan a mi estancia, a final de mes yo solo meto 27 niños y esos tres nombres lo jalan a otra estancia, esa era la manera en que operaban”, comentó.
Destacó que se trata de irregularidades que se sabían que existían, pero no se contaba con las pruebas, para hacer una acusación seria.
En el puerto de Veracruz, existen 43 estancias infantiles. A nivel estatal, existen alrededor de 650, mientras que en el país, existen 9 mil 600.
Destacó que la determinación de entregar el subsidio de mil 600 pesos de manera directa a los padres de familia, obligará a las instancia infantiles a desaparecer.
ELDICTAMEN
















