La petrolera italiana ENI se convirtió esta semana en la primera compañía ganadora de una licitación en producir crudo de manera comercial en aguas del Golfo de México, en el bloque ATM (Amoca, Tecoalli y Miztón), con una extracción promedio de 4,300 barriles promedio diario (bpd) de petróleo.
Este volumen de barriles colocará al operador italiano como el tercer contrato con mayor producción entre los 15 bloques que ahora reportan alguna extracción bajo este modelo, sólo superado por dos contratos de Pemex.
La mayor cantidad de crudo de los contratos derivados de la reforma energética provienen de Pemex y suman 73,727 barriles promedio diario. El activo EK-Balam encabeza la lista, con una aportación de 41,305 barriles de ese total. Le sigue Santuario-Golpe con 10,120 barriles.
Esta proyección es más del doble de los 40,000 barriles promedio diario que esperaba sacar Pemex en el pico de producción de este proyecto, cuando presentó su estrategia ante la CNH en 2014 como parte de la Ronda Cero, dice Pablo Zárate, director de la consultora Pulso Energético.
“Lo que presenta ENI es de poco más de 90,000 barriles diarios, hablas de más del doble y un pico que dura entre tres y cinco años de manera sostenida. En el agregado de la producción en la vida del contrato, esencialmente se triplicó”, dice el analista.
Esta cifra de extracción puede poner al campo entre los cinco de mayor aportación de petróleo en el país, superando incluso a Akal, el mayor campo productor del activo Cantarell.
Los trabajos de la petrolera italiana permitieron, además, incrementar las reservas probadas y posibles del activo de 107 millones a 412 millones de barriles de petróleo, según cifras de la CNH.
“Es una transformación de un proyecto que iba a ser de media tabla para abajo, a uno que si bien no es el más grande del país, sí va a aportar un monto importante de producción y de inversiones, con 7,000 millones de dólares “, dice Zárate.
Este contrato se suma a otros dos otorgados durante la Ronda 1.2 que han multiplicado sus reservas.
Hokchi multiplicó por 2.9 veces las reservas 2P (probadas y posibles) en su proyecto al pasar de 61 millones a 178 millones de barriles; mientras que el consorcio de Fieldwood y Petrobal las elevó en 6.7 veces de 68 millones a 453 millones de barriles, según cifras de la CNH.
“A abril de 2019, estos tres operadores habían ejercido inversiones por 723 millones de dólares principalmente en actividades de evaluación. La inversión programada total es de 18,346 millones de dólares durante la vigencia de los contratos (que llegan a 2040)”, según un documento de la CNH publicado en mayo.
La Comisión ha otorgado más de 100 contratos a lo largo de las tres rondas petroleras y procesos de asociación con Pemex que la administración de Andrés Manuel López Obrador frenó argumentando que no habían cumplido con las expectativas. El gobierno ha apostado más por impulsar los proyectos para que Pemex incremente su extracción que ahora se ubica en cerca de 1.7 millones de barriles promedio diario.
Con información de EXPANSIÓN