En la cuenta regresiva hacia la transición en los ayuntamientos, la expectativa ciudadana es alta y espera una gestión eficiente, ética y cercana a la gente, señala obispo.
Hipólito Moreno Tapia
Álamo, Ver.– A casi tres meses de que concluyan las administraciones municipales y con la llegada de nuevos alcaldes en enero próximo, la Iglesia Católica recordó que existen compromisos que deberán asumir las nuevas autoridades locales.
Durante su reciente visita a esta ciudad, el obispo de la Diócesis de Tuxpan, Roberto Madrigal Gallegos, expresó un mensaje dirigido especialmente a quienes asumirán cargos públicos a partir del próximo año.
El prelado hizo un llamado a ejercer el servicio público con responsabilidad, preparación y sensibilidad hacia la comunidad. Lo anterior, dijo, lo planteó mediante una carta.
“Les escribí primero para felicitarlos, porque llegar a ese nivel es fruto de su esfuerzo”, comentó el obispo, destacando que el servicio público exige más que buenas intenciones. “Hoy se requieren servidores con competencia, es decir, que sepan hacer lo que van a hacer. También les pediría temor de Dios y que busquen rodearse de personas que sí sepan cumplir su misión”, añadió.
Madrigal Gallegos enfatizó que no basta con que los colaboradores de los futuros alcaldes sean amigos o conocidos, sino que deben estar preparados y capacitados para ejercer sus funciones.
“Yo tengo también a mis sacerdotes que me ayudan, y para ello se requiere cualidades, preparación y competencia, no de competir, sino de estar a la altura del servicio que se les va a encomendar”, explicó.
El líder eclesiástico remarcó que, aunque es común escuchar promesas de mejora con cada nuevo gobierno, lo importante es actuar con responsabilidad desde el primer momento. “Siempre decimos: ‘ahora seremos mejores’, pero eso lo escuchamos siempre. Hay que hacerlo en el momento real”, concluyó.
La postura de la Iglesia se da en un contexto de transición política con la renovación de los ayuntamientos, donde la expectativa ciudadana ante las nuevas administraciones es alta y el llamado a una gestión eficiente, ética y cercana a la gente cobra mayor relevancia.