Por Vicente Martínez
Tras la inundación del pasado 10 de octubre, provocada por el desbordamiento del río Cazones, representantes de Greenpeace México recorrieron la colonia 27 de Septiembre para evaluar los daños ambientales y documentar los impactos del desastre en las principales áreas afectadas en Poza Rica.
La activista Nancy Lembrino advirtió que los desastres naturales son producto de la inacción, señalando que las autoridades continúan cegadas ante los efectos del cambio climático y no han sabido adaptarse a la nueva realidad ambiental.
Greenpeace México señala que es urgente que se destine un presupuesto específico para acciones de mitigación y prevención frente a los fenómenos meteorológicos extremos que, cada vez con más frecuencia, golpean al país.
Durante este previo análisis, la ONG evidenció la vulnerabilidad ambiental de la zona norte de Veracruz y la falta de planeación ante fenómenos cada vez más intensos.
En el marco de su próxima cumbre nacional, Greenpeace llamó a acelerar la transición energética y dejar atrás los combustibles fósiles, tópico que forma parte de su agenda internacional.














