Desmantelada, sin presupuesto y con amenazas de despidos, finalmente la Procuraduria Federal del Consumidor (Profeco) cerró las puertas de su subdelegación en el municipio de Xalapa.
Por lo anterior, consumidores de la Capital, y de al menos sesenta municipios en la zona norte y centro deberán acudir con sus reclamos a la delegación estatal del puerto de Veracruz.
A partir de este martes, un memorándum interno comunica a los trabajadores que no se impartirán nuevos servicios de asesoría y asistencia, además deja la dependencia de recibir quejas de los afectados en sus derechos.
Con lo anterior finaliza el proceso anteriormente anunciado para recortar funciones a la Profeco, la cual, desde inicios de año suspendió las labores de verificación a los comercios y sólo operó mediante quejas.