CAZONES DE HERRERA, VER. – Tan solo porque la gente no votó por su mujer, para Agente Municipal, el director de Protección Civil José Manuel Guerrero Domínguez, vecino de la comunidad Barra de Cazones, no quiere intervenir o apoyar en la gestión para reparar más de cincuenta luminarias dañadas desde agosto del 2021, cuando azotó el huracán Grace, lo que mantiene en jaque a los habitantes de esta importante localidad cien por ciento turística.

El ayuntamiento dispone de un recurso por 300 mil pesos, del RORTAMUN, para la adquisición de lluminarias y balastras para alumbrado público, pero hasta ahora, el alcalde Miguel Angel Uribe Toral no lo ha querido ejercer y mientras tanto, el pueblo sufre en penumbras.

De acuerdo con la Ley 856 de Protección Civil para el Estado de Veracruz, los directores Municipales deben identificar las necesidades de una población y recurrir ante las instancias correspondientes, para subsanarlas cuanto antes, pero en La Barra, José Manuel lo único que hace es emborracharse y en ese estado, hacer uso de la unidad oficial, de lo cual dan cuenta sus propios vecinos.

Es así que, desde enero de este año, al inicio del gobierno de Miguel Angel Uribe Toral, las familias claman porque se coloquen nuevas luminarias en las calles de La Barra, ya que, en plena temporada vacacional por el verano, los turistas gustan de salir a disfrutar la noche en el malecón, en la orilla de la playa, pero en total penumbras, solo viven noches de terror, ante el temor de ser asaltados.