Ciudad de México.- Carlos Slim, el empresario más rico del país, ha dado un paso decisivo en el sector energético al convertirse en el principal socio privado de Petróleos Mexicanos (Pemex). Con inversiones que superan los 2 mil millones de dólares, Slim refuerza su presencia en una industria estratégica para México.
El magnate inició su incursión con la compra de acciones en Talos Energy, y posteriormente concretó la adquisición de yacimientos por 530 millones de dólares. Además, lanzó un ambicioso proyecto de explotación de gas en el Golfo de México con una inversión de 1,200 millones.
En un contexto donde Pemex enfrenta serias dificultades financieras, la participación de Slim representa una alianza clave que aporta capital, experiencia y operatividad. Con esta nueva apuesta, el empresario no solo diversifica su portafolio, sino que retoma un papel central en los sectores estratégicos del país, como ya lo hiciera en los años 90 con Telmex.
