CAZONES DE HERRERA, VER.- Industriales de la masa y tortilla aseguran que la presencia de pequeños nuevos molinos, la falta de organización de ese gremio y al nulo apoyo del gobierno federal con subsidios (como había antes), han propiciado un desgaste económico y muchos ya piensan en cerrar su negocio, pues sufren una caída de un 30 por ciento.
Para Juana García Martínez, con varios años trabajando este ramo, la situación está cada vez más difícil y el alza a las gasolinas vino a rematar, porque si ahora el kilogramo de tortilla vale 12 pesos y la masa 10 pesos, en unos días es un hecho que lleguen a costar 16 y 14 pesos, respectivamente.
POR ROBERTO AGUILAR TOLENTINO
Gráficas Ignacio Rivera
















