La Mata de Tampamachoco es una de las comunidades de pescadores más afectadas por la contaminación de la Termoeléctrica Adolfo López Mateos y posee un alto índice de casos de cáncer. Por ello, cuando la CFE anunció que destinaría 25 millones de pesos para apoyar al sector educativo de la zona afectada, maestros y alumnos de la Escuela Primaria Corregidora pidieron un techo para su cancha de usos múltiples, pero, cuando el dinero llegó, los dejaron fuera.
Los recursos federales fueron liberados por la Dirección de Finanzas de CFE y se les etiquetó como “donativos”. El problema fue que el superintendente Guillermo Castillo y el administrador Jorge Aguilar Zamudio cedieron el control de los apoyos al gobierno municipal y desde la Alcaldía se decidió quién era beneficiado.
Indebidamente, dejaron fuera a la Primaria Corregidora, Clave 30DPR5402T y los hijos de pescadores, que acuden a este plantel, se quedaron sin techo, por lo que siguen realizando actividades paraescolares bajo el sol y temperaturas superiores a los 35 grados.